La presidente de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), Sandra Forero, reveló este miércoles que el comportamiento del sector fue positivo al cierre del primer semestre de 2021.
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Es decir, que el comportamiento de las ventas de vivienda entre enero y junio de este año es mucho mejor al esperado, de acuerdo con Forero, la confianza ha sido el factor clave para la recuperación del sector. “Las ventas, en todos los segmentos, evidencian la confianza de los hogares en la inversión en vivienda nueva en el país”, expuso.
Así las cosas, en este periodo se vendieron 112.995 nuevas viviendas mostrando un crecimiento de 34.000 unidades frente al primer semestre de 2020 (79.014) o de 43 %.
La vivienda VIS (de interés social) se consolidó como el segmento más importante con 78.540 ventas, evidenciando un alza de 45 % en comparación con el mismo periodo del año anterior. En este rubro los subsidios y la confianza en el modelo Mi Casa Ya, según Camacol, han sido la base para su repunte.
En el segmento medio ($135 millones – $450 millones) también se mantiene la reactivación al lograr vender 27.256 unidades de vivienda. Opciones como el Frech No VIS, sumado a las condiciones favorables en tasas de interés y una oferta amplia, soportan ese positivo desempeño, de acuerdo con el balance de Camacol. Según el gremio, las ventas crecieron 38 % en 2021-1.
La agremiación resaltó que desde el primer semestre de 2017 este segmento venía presentado un declive al pasar de 30.942 en 2017-1 a 19.745 en 2020-1. Pero en 2021 se rompió esa senda y se prevé un buen ritmo de recuperación.
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De otra parte, en el segmento alto (más de $450 millones), Camacol informó que también ha dado señales de aceleración y crecimiento, pues luego de cuatro años de reducciones en este tipo de viviendas, en el primer semestre de 2021 se observó un favorable repunte de 41 %, lo que daría señales de un positivo cambio de tendencia.
El departamento que mayor variación arrojó en venta de viviendas en el primer semestre del año fue Bolívar con 107 %, seguido de Boyacá con 106 %, Cesar con 99 % y Meta con 99 %.
Los que menos variación positiva presentaron fueron Cauca con 1 %, Nariño con 6 %, Magdalena con 9 % y Caldas con 11 %. Entre tanto, Bogotá y Cundinamarca obtuvieron el noveno lugar en todo el ranking con un crecimiento de 40 %. El único departamento que presentó una variación negativa fue Risaralda con -13 %.
En cuanto a las iniciaciones de obra se ha reactivado de manera sostenida. En el primer semestre se inició la construcción de 77.216 viviendas, un 40 % más que el periodo anterior o 1,7 millones más que en 2020-1, lo que representa el inicio de construcción de 5,6 millones de metros cuadrados. “El volumen de actividad refleja señales en la dirección correcta. Los inicios de obras han mantenido una senda de recuperación”, indicó Sandra Forero.
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De hecho, este dato llama la atención porque su desempeño ha sido tan positivo que ya superó los niveles del primer semestre de 2018, cuando entonces las iniciaciones de obra llegaron a las 73.648 viviendas (5,8 millones de metros cuadrados).
Sin embargo, Camacol destacó que Colombia aún tiene un potencial para iniciar 60.000 unidades adicionales en el corto plazo, y lograr así el mayor volumen de los últimos años.
Perspectivas
En cuanto a las perspectivas para el segundo semestre de 2021, anticipan un periodo nuevamente positivo. Pues se esperan ventas por 119.300 unidades y 88.800 viviendas iniciando su construcción.
Lo que llevaría a cerrar 2021 con un total de 232.300 unidades de viviendas nuevas presentando un incremento anual de 13,4 % compuesto, principalmente, por vivienda VIS con 160.980 y No VIS con 71.315.
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Estas perspectivas dependen de que se modere la presión de costos de construcción que ha experimentado el sector a lo largo del último año. También de que se garantice el abastecimiento de insumos en el canal de proveeduría comercial e industrial del sector.
Además, de que se pueda dar celeridad a los trámites y procedimientos que hoy retrasan el inicio de las obras y de que no existan nuevos bloqueos ni afectaciones de movilidad, según lo retrató Camacol.
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