En Chile, a pesar que se registra una alta incorporación de proyectos nuevos a la oferta inmobiliaria, particularmente en la Región Metropolitana, incluso superando al trimestre anterior, apenas se vendieron 6.008 unidades durante el periodo.
Esto representa una caída de 31,0% respecto al trimestre anterior, siendo el registro más bajo en los últimos 10 años.
“Producto del estallido social la gente dejó de ir a las salas de venta, dada la incertidumbre y percepción de condiciones pocas optimas, postergando su decisión de compra”, señaló Javier Varleta, gerente de Estudios Territoriales de GfK Chile.
La baja principal se encuentra en las viviendas de superficies pequeñas, principalmente departamentos, siendo las unidades entre las 2.000 y 3.000 Unidades de Fomento (UF) las más afectadas.
“Cuando se analiza quienes demandan este tipo de productos, claramente son los inversionistas quienes están dejando de comprar”, comentó Varleta.
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