En agosto de 2023, el presidente de Vanti, Rodolfo Anaya, le había dicho a Valora Analitik que tenía una propuesta para que en Colombia se impulse un proyecto que permita construir una segunda planta de importación de gas en el Atlántico que respalde la que está en operaciones desde diciembre de 2016.
Ahora, en el Congreso de Asoenergía, el líder de Vanti retomó el tema e insistió en que esa infraestructura debe construirse. “Yo quiero dejar algo claro: Colombia necesita una nueva planta de importación ya, la necesita. No demos más vueltas con eso, no nos engañemos”.
Agregó que esta iniciativa debería ejecutarse en el Caribe “¿Por qué? porque en el Pacífico no hay gasoducto. Simplemente dejo esta idea: fue muy exitoso el tema de que el grupo térmico -las plantas de generación térmica en conjunto- contratara la importación de gas para atender su demanda”.
Por esta razón, Ayana aseguró que el mejor actor que puede viabilizar un proyecto de importación de gas en Colombia son las distribuidoras que están al interior del país. “La idea es crear el grupo de las distribuidoras, tener nuestra propia planta de regasificación y con eso asegurar el ofrecimiento a la demanda”.
Para el experto, si esa decisión se toma “con decisión y voluntad, ese grupo podrá entregar gas importado en 2027 para suplir la demanda que tiene mayor capacidad de pago que es la residencial y pudiéramos liberar gas para la industria, de esa forma equilibrar el abastecimiento del energético y la economía en el país”.
Una fuente experta del sector, que pidió no ser citada, manifestó que la planta de regasificación se necesita, pero en el Pacífico colombiano, esto porque el suroccidente del país no cuenta con respaldo ante las contingencia -como ocurrió en 2023 con la contingencia de TGI en Cerro Bravo-.
Para la fuente, el sistema de gas en el sur del país es muy vulnerable y ante cualquier obstáculo puede quedar paralizado como ya ha ocurrido en algunas ocasiones.
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