La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) publicó los datos correspondientes a marzo sobre los mercados mundiales de carga aérea, los cuales mostraron un fuerte crecimiento impulsado, entre otras cosas, por las dificultades actuales en la movilización marítima de mercancías.
La demanda total, medida en toneladas de carga-kilómetro (CTK), aumentó 10,3 % en comparación con marzo de 2023, convirtiéndose en el cuarto mes consecutivo de incremento interanual de dos dígitos.
Por su parte, el indicador de capacidad, medida en toneladas de carga-kilómetro disponibles (ACTK), tuvo un alza de 7,3 %.
«La demanda de carga aérea creció en marzo, lo que contribuyó a un sólido desempeño en el primer trimestre que superó ligeramente, incluso, el desempeño excepcionalmente sólido del primer trimestre de 2021 durante la crisis de Covid«, dijo Willie Walsh, director general de la IATA.
El mayor crecimiento de toneladas de carga por kilómetro de aerolíneas se registró en Medio Oriente y África, con 19,9 % y 14,1 %, respectivamente.
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A estas empresas le siguieron las de Asia Pacífico (13,8 %), Europa (10 %) y América Latina (7,8 %). Los transportistas norteamericanos experimentaron el crecimiento anual más bajo con 3,1 % interanual.
Retrasos por mar impulsan carga aérea
El informe destaca que la evolución relativamente estable de comercio de mercancías y el crecimiento moderado de la cifra de producción industrial pospandemia contrasta marcadamente con el fuerte crecimiento de la carga aérea demanda desde principios de 2023.
“Esto posiblemente sea respaldado por el cambio de las cadenas de suministro en el espacio del comercio electrónico, así como por un aumento reciente interés en los servicios mar-aire debido a las actuales limitaciones de capacidad en el transporte marítimo, entre otros factores”, se lee en el documento.
Y es que hay que decir que el transporte marítimo se enfrenta hoy a importantes desafíos como los bajos niveles del agua por el Fenómeno de El Niño en accesos como el Canal de Panamá y la crisis en el Mar Rojo que ha hecho que varias navieras desvíen sus rutas.
Para Walsh, este resultado, junto con las previsiones de que el comercio transfronterizo mundial y la producción industrial continuarán mostrando una tendencia moderada, 2024 se perfila como un año sólido para la carga aérea.
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