El 97% de los encuestados respondieron que prefieren trabajar en un formato diferente al presencial tradicional, según encuesta a empleados y empresas.
En Colombia, uno de los proyectos que suscita más interés desde el plano económico y social es la ley de desconexión laboral, una iniciativa que está para sanción presidencial. El regreso a la nueva normalidad tras las primeras olas de contagios por la pandemia del coronavirus ha planteado la discusión de temas como el teletrabajo y la posibilidad del retorno a las oficinas. Vea más en Finanzas Personales.
Precisamente, una encuesta realizada por NTT Data Group encontró que el 80% de empleados esperan que, en el futuro cercano, las empresas respeten su vida personal y su tiempo con la familia, amigos y pasatiempos.
La investigación captó las expectativas de 3.249 profesionales empleados y 34 líderes ejecutivos de 10 países a nivel mundial, sobre el futuro del trabajo de aquí a cinco años. También, según los datos, la encuesta trazó las competencias diferenciales tanto de líderes como de empleados, que deberían existir en 2025.
En esta misma línea, los resultados muestran el deseo de los profesionales de contar con el apoyo de las empresas para su desarrollo profesional; concretamente, poco más de 65% esperan que las empresas del futuro de aquí a cinco años, inviertan en su educación y desarrollo y casi 45%, esperan que las empresas del futuro para 2025 les ofrezcan beneficios flexibles como seguro de salud, alimentos, transporte, seguro de vida, guardería, etc.
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Otras preocupaciones de los profesionales
Entre otras preocupaciones de los profesionales encuestados se encuentran: la salud mental, la imprevisibilidad y la relación humano-máquina. En primer lugar, sobre este tipo de salud, al menos 44% tiene un alto grado de preocupación sobre si la cantidad de trabajo afectará la salud mental de las personas y otro 43% destaca una preocupación mediana con respecto al tema. En segundo lugar, el estudio señaló que 48% de los encuestados tienen un grado promedio de preocupación por que los jóvenes sean más valorados que la experiencia dentro de cinco años.
Y, en tercer lugar, el 41% de los encuestados temen que la tecnología pueda reemplazar a las personas en algunas funciones. Sobre lo anterior, los expertos y ejecutivos entrevistados subrayan la importancia de que los profesionales tengan una actitud flexible y una capacidad de adaptación al entorno, que le permita aprender y reaprender de las nuevas situaciones y desafíos.
La investigación también identificó que las cualidades más deseables en los empleados en los próximos cinco años serán: capacidad de aprendizaje, flexibilidad, buena comunicación y equilibrio.
Según Leylah Macluf, directora de Talento y Transformación la región de América de NTT DATA, en el estudio los entrevistados destacan que el conocimiento está perdiendo relevancia en relación con las habilidades blandas, dado que el primero puede cambiar rápidamente.
Así mismo, casi el 97% de los encuestados respondieron que prefieren trabajar en un formato diferente al presencial tradicional. Además, menos del 1,5% de los encuestados desean que el trabajo vuelva exclusivamente a la oficina.
En relación a ello, Leylah Macluf, señaló que «el teletrabajo demostró que es posible ser productivo sin la necesidad de estar físicamente presente en la oficina, destacando beneficios como ganar tiempo con la familia, escapar del tráfico, reducir costos, entre otros. Esto no significa que no haya nadie que extrañe la convivencia social, pero demuestra que la flexibilidad se ha convertido en un deseo profesional».
Habilidades necesarias en los profesionales de los próximos años
Sobre las características de un profesional de alto perfil dentro de cinco años, 81% de los encuestados respondieron que los profesionales con creatividad y capacidad analítica tendrán un alto grado de importancia para las empresas en el futuro.
El 84% también cree que los profesionales que tienen una visión de innovación, logran ir más allá de lo obvio y tienen una mente abierta tendrán un alto grado de éxito y 60% destacan que la comprensión de la importancia de la diversidad como motor de innovación debe formar parte de las habilidades del profesional exitoso.
No menos importante será el dominio tecnológico, el cual para expertos y ejecutivos será clave, pero únicamente como un requisito para ingresar al mercado laboral, no como un diferencial. «El conocimiento sobre el uso de la tecnología no es autosuficiente. Necesita el lado humano que crea, desarrolla y gestiona esa tecnología. Estamos hablando de una perspectiva humana sobre la tecnología. La capacidad de crear, analizar, criticar vendrá del lado humano y no de la máquina», destacó la directora de talento y transformación de la compañía.
