The Economist analizó la situación actual del presidente Gustavo Petro y sus ambiciosas reformas, en un artículo titulado: «El presidente izquierdista de Colombia está tambaleando».
La publicación reconoce que el mandatario asumió el poder con la promesa de reducir la desigualdad en «uno de los países más desiguales del mundo» y que con su programa de reformas quiere cumplir ese objetivo, pero los artículos no salen a flote en el Congreso.
The Economist sobre reformas de Petro
El artículo destaca que el presidente Petro está impulsando varias reformas clave, entre ellas la reforma a la salud, que se hundió en la actual legislatura, pero que se espera sea radicada nuevamente el próximo 20 de julio. También se mencionan las reformas laboral y pensional como parte de su agenda.
The Economist advierte que «casi dos años después de su mandato, los proyectos de ley que sustentan sus reformas emblemáticas se han estancado».
Y agrega que la oposición persiste tanto en el Congreso como en las calles. “Está presionando al Congreso para que apruebe las leyes antes de que finalice la sesión legislativa el 20 de junio”.
En ese sentido, The Economist reconoce que la mayoría de los políticos coinciden en que es necesario reformar el sistema de pensiones, teniendo en cuenta que solo una cuarta parte de los colombianos mayores recibe una pensión.
No obstante, cita a la OCDE: “Colombia es el único país de América Latina con un sistema de pensiones que aumenta la desigualdad”. En ese sentido, el artículo alerta que el nuevo modelo que propone Petro podría ser inasequible y agotar los sistemas de pensiones privados.
Por otro lado, el medio sostiene que Petro ha pasado de ser “pragmático a populista”.
“Como era de esperar, despidió a los moderados de su gabinete que se oponían al plan. Muchos colombianos están indignados. Cientos de miles de ellos salieron a las calles en abril para protestar contra la reforma. El Congreso bloqueó el proyecto de ley. Desde entonces, las mayores aseguradoras del país han acusado al gobierno de negarse a aumentar la contribución que hace en consonancia con los crecientes costos de la atención médica”, señala The Economist.
Finalmente, sobresale la reforma laboral que, si bien ofrece ventajas como el aumento del pago de horas extras y contratos más largos, se reclama que “es poco probable que se convierta en ley mientras todavía estén trabajando en las pensiones”.
La constituyente de Petro: menos populismo y más pragmatismo
The Economist indicó que Petro ha anunciado que los colombianos están pidiendo “un poder constituyente”, es decir, una Asamblea Nacional Constituyente.
Además, ha promovido un discurso de “golpe blando”, lo que ha traducido en una polarización que “está asustando a los inversores”.
“El crecimiento también ha sido lento. La recaudación de impuestos cayó un 10 % en los primeros cuatro meses de 2024 en comparación con el mismo período del año anterior. El 6 de junio, el ministro de Finanzas bloqueó temporalmente nuevos gastos para proyectos públicos”.
Finalmente, el artículo advierte que la situación de violencia y corrupción está erosionando el capital político del gobierno.
«Los tiroteos y secuestros están aumentando en el sur del país, socavando la promesa de campaña de Petro de alcanzar una paz total. Además, el exjefe de la agencia de gestión de riesgos de desastres y otros funcionarios están siendo investigados por supuestamente recibir sobornos a través de contratos de obras públicas inflados».
Por último, The Economist señala que: «casi a mitad de su mandato, Petro está tratando de cumplir su agenda volviéndose más combativo. Sin embargo, necesita negociar con el Congreso y apaciguar a los manifestantes para poder reformar exitosamente el sistema de bienestar de Colombia. Esto requiere menos populismo y más pragmatismo».
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