El ministerio de Comercio, Industria y Turismo de Colombia, Luis Carlos Reyes, profundizó este jueves sobre la suspensión del acuerdo comercial con Brasil relacionado con la importación de vehículos sin arancel.
El funcionario explicó que el objetivo de la revisión es contribuir con el fortalecimiento de la producción nacional del sector.
“Una parte importante de la política industrial del Gobierno es fortalecer los encadenamientos productivos del sector automotriz, concretamente en lo tocante a la producción nacional de vehículos eléctricos. Tenemos una situación actualmente que fue la misma que llevó a la salida de la planta de Colmotores del país y tiene que ver con una serie de acuerdo arancelarios con Brasil”, introdujo.
De acuerdo con el funcionario, en el marco del acuerdo que se tiene con Mercosur había un entendimiento que está expirando justo ahora.
“Si Colombia deseaba continuar con ese entendimiento -que justamente llevó a la salida de Colmotores- habríamos puesto en riesgo una política industrial que no es solo de producción de automóviles sino de toda la industria, autopartes y múltiples empresas que están asociadas a ese sector. Lo que hemos manifestado es nuestra intención de revisar ese entendimiento para que se enmarque en una política de crecimiento de sector automotriz”, dijo.
El acuerdo comercial de importación de vehículos con Brasil
De acuerdo con el Ministerio, en 2017 se adelantó una profundización del Acuerdo de Complementación Económica entre Mercosur y Colombia.
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En dicho acuerdo, el apéndice que hablaba sobre el acuerdo entre Brasil y Colombia sobre la profundización de preferencias arancelarias bilaterales en el sector automotor se acordaron unas preferencias arancelarias y se establecieron cupos de importación para ciertos vehículos, en un período de ocho años a partir de su entrada en vigencia.
Con este entendimiento se acordó otorgar de forma recíproca una preferencia arancelaria del 100 % a la importación del cupo definido. Para el caso de Brasil, el cupo fue de 12.000 unidades en el primer año y hasta 50.000 en el octavo año de vigencia del acuerdo.
Lo anterior, buscaba promover el desarrollo de la industria automotriz y sectores asociados, así como el comercio entre los dos países.
Sin embargo, el Ministerio encontró que la finalidad del acuerdo no se ha cumplido “debido a que existe un marcado desequilibrio en la balanza comercial entre Colombia y Brasil en materia de vehículos, lo cual afecta de manera significativa a la industria automotriz colombiana”.
Mientras que, Brasil ha logrado cifras récord de exportaciones hacia Colombia, tanto así que hoy es el principal jugador del mercado, en Colombia ha caído en forma sistemática la venta de vehículos nacionales, e incluso GM-Colmotores decidió cerrar su planta.
“La idea con esto es dinamiza la industria local y llevarla a ser una industria fuerte en términos de exportación. A diferencia de políticas industriales del pasado que buscaban alejar de manera casi indefinida al mercado nacional de la industria extranjera, lo que se busca acá es lograr las economías de escala de producción de vehículos -especialmente eléctricos- para tener una producción competitiva a nivel internacional y que nos lleve a ser exportadores acá», dijo.
Esto requiere una protección inteligente de los sectores de alto valor agregado con la búsqueda de economías de escala, finalizó Reyes.
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