Camila Salamanca, directora ejecutiva de Endeavor Colombia, conversó con Valora Analitik y compartió un análisis detallado sobre el estado actual del ecosistema de startups en América Latina.
Además de los retos para el levantamiento de capital y la evolución del mercado en los últimos años.
Durante la entrevista, abordó temas como el impacto global de la contracción en inversiones, los cambios en las dinámicas del mercado y las perspectivas para los próximos años.
La caída global en el levantamiento de capital para las startups
«Es importante entender que la caída en las rondas de capital no es un fenómeno exclusivo de América Latina; es una tendencia global», explicó Salamanca.
Esta caída, según señaló, está directamente relacionada con el aumento de las tasas de interés, que ha hecho que los inversionistas adopten posturas más conservadoras. «El dinero dejó de ser barato. Esto significa que los inversionistas ahora evalúan con mucho más cuidado cada dólar que destinan a una empresa. Se preguntan: ¿realmente vale la pena el riesgo?»
De igual manera, Salamanca detalló que las rondas de capital en América Latina disminuyeron un 72 % desde su punto más alto en 2021, mientras que Europa y Estados Unidos registraron caídas del 67 % y 60 %, respectivamente. A esta contracción global se sumaron factores internos de la región, como la inflación, el menor acceso a financiamiento y el impacto de la pandemia.
«A diferencia de otras regiones, América Latina tiene menos margen de maniobra cuando se enfrenta a crisis globales. Esto afecta directamente la supervivencia de las startups, sobre todo aquellas que dependían exclusivamente de capital externo para operar», puntualizó.
El 2024: un año de recuperación gradual
No obstante, Salamanca destacó que el panorama empezó a cambiar en 2024. «Aunque seguimos lejos de los niveles de inversión de 2021, el mercado comenzó a dar señales de recuperación», aseguró.
En cifras, el capital levantado en América Latina creció un 30 % en 2024, alcanzando los US3,7 billones. Este repunte estuvo impulsado principalmente por rondas de etapas avanzadas y una mayor concentración de inversiones en sectores estratégicos como las tecnologías emergentes, fintech y sostenibilidad.
«Es alentador ver que los inversionistas están recuperando la confianza en la región, pero ahora exigen mucho más. Ya no basta con tener una idea disruptiva; los emprendedores deben demostrar que sus negocios tienen fundamentos sólidos y que saben cómo usar el capital de manera eficiente», explicó.
Cambios en los criterios de inversión
Uno de los puntos centrales que mencionó Salamanca fue el cambio en los criterios de inversión de los fondos.
Desde 2021, dijo, el 70 % de los fondos ajustaron sus estrategias, priorizando empresas con un camino claro hacia la rentabilidad. «Antes, la narrativa era crecer a toda costa. Ahora, lo primero que preguntan los inversionistas es: ¿Tu modelo de negocio puede sostenerse a largo plazo? ¿Tus unit economics son positivos?», indicó.
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Este cambio ha llevado a una mayor reflexión en las etapas iniciales del levantamiento de capital y a una concentración de recursos en startups más maduras.
«El 67 % del capital invertido en 2024 se destinó a empresas en Series B o superiores. Esto deja a las startups en etapas tempranas en una posición más vulnerable, ya que tienen menos acceso a recursos para validar sus modelos de negocio», agregó Salamanca.
La resiliencia del ecosistema colombiano
En el caso de Colombia, Salamanca resaltó que el país ha mostrado avances significativos en términos de captación de capital y consolidación de su ecosistema emprendedor.
«Colombia logró posicionarse como el segundo país con mayor captación de inversión en América Latina, después de Brasil y superando a México. Esto no es casualidad; tiene que ver con la calidad de las startups que estamos viendo y con el trabajo articulado entre el sector público, privado y las organizaciones de apoyo como Endeavor», señaló.
Según Salamanca, con corte del segundo trimestre de 2024, Colombia captó US$237 millones en inversiones, representando el 29 % del total de la región. «Esto es una señal clara de que hay oportunidades, pero también de que las empresas colombianas están respondiendo a las exigencias del mercado global», dijo.
Perspectivas hacia 2025
Al hablar sobre el futuro, Salamanca fue optimista, aunque con cautela. «Espero que las tasas de interés sigan disminuyendo en 2025, lo que debería facilitar el acceso al capital. Además, creo que veremos un aumento en las fusiones y adquisiciones, e incluso IPOs en mercados como Brasil, México y Colombia», comentó.
También hizo énfasis en la importancia de la tecnología, especialmente la inteligencia artificial, como un habilitador clave para las startups.
«La IA no solo permite reducir costos y mejorar la eficiencia operativa, sino que también se está convirtiendo en un diferenciador competitivo para atraer inversión. En 2024, el 25 % del capital invertido en la región se destinó a startups de tecnología e inteligencia artificial, solo superado por el sector fintech, que recibió el 37 % del total», explicó.
Para finalizar, directora ejecutiva de Endeavor Colombia dijo: «Hoy más que nunca, es fundamental tener los pies en la tierra. La clave está en demostrar que puedes ser rentable, que cada peso que inviertes genera valor y que tu modelo de negocio tiene sentido en el mercado. Ya no estamos en un mundo donde se puede quemar dinero sin consecuencias».
En conclusión, el ecosistema de startups en América Latina enfrenta un proceso de transformación que, aunque desafiante, está lleno de oportunidades para aquellos que logren adaptarse a las nuevas reglas del juego.
