Al cierre del primer trimestre de 2023, el sistema financiero de Colombia generó altas utilidades, jalonadas principalmente por la administración de recursos de terceros.
Según un reporte de la Superintendencia Financiera, en conjunto, el sistema financiero generó ganancias por $45,4 billones lo cual representa una variación anual de 1.202 % si se comparan con los $3,49 billones del mismo periodo de 2022.
Dentro del balance presentado, se destaca que los fondos de pensiones y cesantías fueron los mayores generadores de rendimientos.
Esos fondos obtuvieron $20,1 billones con recursos administrados de terceros, es decir, dinero que fue aportado por sus afiliados y que fue invertido en diversas opciones en el mercado financiero.
Al cierre de marzo de 2023, los fondos de pensiones revirtieron la tendencia negativa de hace un año habían arrojado un saldo negativo de $8,5 billones en los recursos administrados para sus afiliados.
Los segundos recursos que más crecieron fueron los que administran las sociedades fiduciarias. A marzo de 2023, obtuvieron ganancias por $16,2 billones lo cual representó un importante incremento frente a los $3,5 billones de un año antes.
De su parte, los establecimientos dedicados a la colocación de crédito ganaron $3,6 billones en el primer trimestre de 2023, cayendo frente a los $5,7 billones del mismo periodo del año pasado.
Llama la atención el reporte de las entidades oficiales especiales que a marzo del presente año ganaron $1,83 billones, superando ampliamente los $276.000 millones que generaron en utilidad en el mismo lapso de 2022.
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Cartera y activos del sistema financiero
De acuerdo con la Superintendencia Financiera, al cierre de marzo de 2023, los activos del sistema financiero (propios y de terceros) alcanzaron $2,787.5 billones, con una variación real anual de 0,5 % y nominal de 14 % anual.
De este valor, $1.386.4 billones (49,7 % del total) corresponden a recursos propios de las entidades vigiladas, mientras que los recursos de terceros, incluyendo activos en custodia, alcanzan los $1,401.1 billones (50,3 % del total). La relación de activos totales a PIB fue 184,6 %.
Explicó la entidad en su informe que el incremento nominal “obedece al aporte positivo de los establecimientos de crédito, cuyos activos evidenciaron un aumento intermensual de $3,7 billones y de $1,5 billones en inversiones y operaciones con derivados y cuentas por cobrar”.
También se destacó que las sociedades fiduciarias son el principal administrador de activos del sistema financiero, con $923.9 billones, que representan el 65,9 % de los recursos de terceros y el 33,1 % del total de los activos del sistema, de los cuales $247.6 billones correspondieron a la actividad de custodia de valores.
En el caso de la cartera, el informe de la Superintendencia indica que en marzo de 2023 se reportó una desaceleración de la cartera bruta en términos reales hasta registrar una variación anual de 0,11 %.
De esta manera, el saldo bruto de la cartera ascendió a $673.9 billones y el indicador de profundización se situó en 44,6 % del PIB.
El comportamiento del total refleja:
(i) el incremento del saldo en términos intermensuales ($251.600 millones, inferior en $7.5 billones al reportado en igual mes de 2022);
(ii) los desembolsos a hogares y empresas por $46.3 billones;
(iii) el efecto de la inflación en la medida en que la tasa de crecimiento nominal es superior (13,5 %); y
(iv) la dinámica de los castigos frente a la cartera, sumando a marzo $1.4 billones respecto al $1.1 billones reportado en el tercer mes de 2022.
Se detalló en el informe que, del total castigado, el 81 % corresponde al portafolio de consumo y el 14 % a comercial.
La cartera comercial se desaceleró hasta 1,3 % real anual en el mes de marzo de 2023, no obstante, completó 17 meses consecutivos en terreno positivo.
Finalmente, la financiación para adquisición de vivienda disminuyó 0,9 % real anual en marzo de 2023, una mayor contracción respecto a la registrada el mes anterior (-0,2 %).
“Este comportamiento es consistente con la corrección del efecto de la inflación, dado que en términos nominales la modalidad de vivienda crece 12,4 % anual. Los desembolsos en marzo alcanzaron $1.8 billones, impulsados por el segmento No VIS con $1.3 billones. Para el caso de la financiación VIS el saldo reporta un crecimiento real anual de 4,2 % y en No VIS de -2,9 %.