Luego de superar la pandemia, las relaciones comerciales entre México y Colombia, dos aliados de alta importancia, están en un proceso de recuperación y diversificación.
Así lo señaló Rafael Nava y Uribe, presidente de la Cámara de Comercio México Colombia en entrevista para Valora Analitik.
El directivo y también empresario aseguró que esta relación comercial está en proceso de ampliar su alcance, toda vez que se abren nuevas puertas de desarrollo con la actual cercanía ideológica entre gobiernos.
¿Qué es la Cámara de Comercio México y Colombia?
La Cámara México y Colombia es una asociación civil, es una unión de empresas que nació en el 2003, la idea fue del embajador de Colombia en ese entonces, Luis Ignacio Guzmán.
No hay duda de que la similitud entre México y Colombia, sus gentes, calidez, entre otras cualidades, son muy parecidos y no había ninguna razón para no tener algo más firme.
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La idea es fomentar el intercambio de bienes y servicios y también el turismo. Está digitado principalmente a apoyo a los mismos asociados, ser interlocutores con las autoridades.
¿Cuántos afiliados tienen hasta este momento?
Tenemos alrededor de 40. Están Sura, Avianca, Mabe, Aeroméxico, entre otras.
¿Cómo es la dinámica comercial entre México y Colombia?
Llegamos a tener un intercambio comercial alrededor de US$8.000 millones antes de la pandemia (2020), pero la balanza era extremadamente favorable para México.
Hemos estado trabajando con las oficinas comerciales, como ProColombia, para tratar de ir balanceando y no medir estrictamente cuánto producto sale o entra, porque también cuentan las inversiones en ambos países.
Desde el punto de vista de intercambio de dólares es parejo, aunque aparentemente la balanza tal como se mide no se ve así.
Sin embargo, ya la balanza está más pareja, pero el efecto pandemia sí afectó mucho al intercambio comercial y apenas se está empezando a recuperar.
Hay que seguir esforzándonos y trabajando por el comercio bilateral.
Dentro de la Alianza del Pacífico (bloque de integración), Colombia es el cliente y proveedor número uno de México.
¿Cómo puede ser hasta ahora el balance de este año 2023?
El 2023 está llevando la tendencia hacia la recuperación y obviamente lo que ocurra en los países implica a la Cámara.
Entre las preocupaciones está el Plan Nacional de Desarrollo en Colombia y la cantidad de leyes que están debatiéndose en este momento. Entonces, eso trae una situación de “esperar” para ver como quedan las modificaciones y como se puede uno adaptar.
Pero, a ver, eso es normal. Aquí también tuvimos eso hace cuatro años con un cambio ideológico de Gobierno, pero las cosas se van asentando.
¿Y a la Cámara cómo le ha ido este año?
Estamos a un ritmo similar al del 2022. Espero que una vez que se asienten las incertidumbres, despegue y vuelva a traer el ritmo de crecimiento que traíamos.
¿El proceso de reformas que vive Colombia genera temores en el empresariado mexicano?
Somos muy respetuosos, no entramos en política ni especulaciones. Estamos respetuosamente esperando las cuestiones no tanto para ver qué se hace o no, sino cómo se hace, porque la decisión de continuar y la voluntad política de ambos presidentes está muy alineada.
Al estar alineados sí se puede buscar dónde y cómo se pueden lograr la mejora de las relaciones comerciales y turísticas entre ambos países.