En Estados Unidos cada vez son más las empresas que deciden obligar a sus empleados a recibir la vacuna contra el Covid-19 para que estos puedan volver a trabajar a las oficinas.
Esa cuestión, sin embargo, abre el interrogante de si en otros países del mundo las compañías tienen la potestad de instar a sus colaboradores a que reciban la inmunización.
Hay casos, incluso, de firmas como Delta Airlines, que desde noviembre aplicará multas de US$200 mensuales a los subalternos que para entonces no hayan recibido la inoculación, argumentando que no vacunarse representa un riesgo financiero.
Es necesario tener en cuenta que cada país tiene una legislación en materia laboral única que determina si las empresas pueden o no exigir la vacunación a sus trabajadores y, como sucede en Estados Unidos, la normativa es más compleja porque depende de las directrices que den tanto el Gobierno Federal como los estados. (Ver más de Empresas).
Iván Jaramillo Jassir, investigador del Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario, resalta que en Colombia no es viable obligar a los trabajadores a vacunarse por expresa disposición de la Ley Estatutaria de Salud, la Ley 2064 de 2020 y el decreto 109 de 2021.
Esas determinaciones indican que el proceso de vacunación es voluntario, por lo tanto, el empleador no puede imponer ese requisito para la contratación o el mantenimiento del empleo.
Al analizar la legislación colombiana, Jassir considera que “resulta viable y proporcional el diseño de incentivos a la vacunación, sin sancionar o afectar los derechos de los trabajadores que decidan no vacunarse”.
Apple, Facebook, Google y Goldman Sachs son otras de las empresas de Estados Unidos que han impuesto requisitos a los empleados para que reciban la vacuna contra el Covid-19. Por ejemplo, solo los vacunados pueden acceder a las oficinas y, quienes no reciben la inmunización, deben llegar a acuerdos con recursos humanos.
La normativa de Colombia traza que la relación entre empleador y empleado se centra en la responsabilidad de cumplir las directrices impartidas por el primero. Además, con la irrupción de la pandemia, el Ejecutivo hizo de la vacunación contra la pandemia una cuestión voluntaria.
Por eso, “el único escenario que se podría plantear en Colombia para que la vacuna contra el Covid-19 se convirtiera en un asunto obligatorio es que saliera una resolución o decreto ordenando a los empleadores un programa de vacunación. Es decir, que se cree una normativa para convertirla en una obligación”, explica Javier Almanza, coordinador del área laboral del Consultorio Jurídico de la Universidad del Rosario.
Incluso, la puerta a que la Corte Constitucional delimite hasta dónde prima el interés público (salud) sobre el particular (el derecho a no vacunarse) está abierta, mientras se mantenga el debate sobre la administración de las inmunizaciones.
Eso sí: el profesor Almanza destaca que el empleador sí puede tomar medidas como el trabajo en casa para el personal que tiene la posibilidad de hacerlo en esas modalidades y resalta que hay una obligación mutua de respetar las medidas de bioseguridad.
Justamente, las compañías están impulsando el regreso a las oficinas siguiendo protocolos como el uso de tapabocas, lavado constante de manos y el distanciamiento social, una cuestión que sí es permitida por la ley de Colombia.