ASIA
Las bolsas asiáticas comenzaron la semana con pérdidas generalizadas ante la incertidumbre por el aumento de casos de Covid-19 en el mundo, aunque mercados como Yakarta en Indonesia y Manila en Filipinas consiguieron cerrar en positivo.
La plaza de Manila continuó, aunque de manera más discreta, su rally de ganancias protagonizado la semana pasada gracias a la relajación de las restricciones impuestas en la capital filipina para combatir la pandemia de coronavirus.
De otro lado, las acciones de Samsung Electronics y sus filiales subían después de que la muerte del presidente Lee Kun-hee, ocurrida un día antes, despertara la esperanza de movimientos de participaciones en la empresa, mayores dividendos y una ansiada reestructuración, dijeron analistas consultados.
Los inversores confían en que los imperativos de mantener el control de la familia Lee y el pago del impuesto de sucesión – estimado en unos 10 billones de wones (US$8.900 millones) solo por las acciones en empresas cotizadas – serán los catalizadores del cambio, aunque los analistas están divididos en cuanto a la dirección que tomará la transformación.
El hijo y presunto heredero Jay Y. Lee tiene una participación del 17,3% en Samsung C&T, el holding de facto del grupo, mientras que el difunto Lee era el principal accionista de Samsung Life con un 20,76% del capital.
El impuesto de sucesión es exorbitante, por lo que los miembros de la familia podrían no tener otra opción que vender participaciones en algunas empresas no fundamentales como Samsung Life, explicó el analista de NH Investment Securities, Kim Dong-yang.
EUROPA
Las bolsas europeas caen con fuerza este lunes, después de que Italia y España impusieran nuevas restricciones para controlar el rebrote de casos de coronavirus, mientras las acciones de la alemana SAP desplomaban un 20% tras recortar sus perspectivas para 2020.
El índice Stoxx 600 caía un 1,2%, con el apetito de riesgo globalmente minado por las preocupaciones sobre el progreso de los estímulos fiscales de EE. UU. y la inquietud por las elecciones presidenciales.
El índice alemán DAX se dejaba un 2,7% y tocaba mínimos de tres meses después de que la empresa de software SAP abandonara los objetivos de rentabilidad a mediano plazo y advirtiera que su negocio tardaría más de lo esperado en recuperarse de la pandemia.
Europa se convirtió en la segunda región, después de América Latina, en superar las 250.000 muertes por Covid-19, según un recuento de Reuters, mientras muchos países del sur de Europa registraban el mayor número de casos del virus en un solo día.
Italia ordenó ayer el cierre de bares y restaurantes en horas de la noche y de los gimnasios públicos y cines, mientras que el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, anunció un nuevo estado de alarma.
El índice de la Bolsa de Milán cedía un 1,5%, pese a que la agencia de calificación Standard and Poor’s elevó la perspectiva soberana de Italia de negativa a estable.
EE. UU.
Wall Street apunta a una apertura a la baja en medio del contexto de última semana de la carrera electoral a la presidencia de Estados Unidos y ante el tire y afloje entre la Casa Blanca, los republicanos y los demócratas en torno a otro paquete de estímulo fiscal.
Esto pues el debate en curso sobre si se puede llegar a un acuerdo sobre otro paquete de ayuda para la pandemia del coronavirus seguirá siendo un motor clave para los mercados y las elecciones en las que se ve como gran favorito Joe Biden contra Donald Trump.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, dijo que todavía era posible obtener otra ronda de estímulo fiscal antes de las elecciones, pero que era cosa del presidente Trump actuar.
Pero el líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, el más alto cargo republicano en el Congreso, no quiere llevar un gran proyecto de ley al Senado antes de las elecciones, en parte por las preocupaciones sobre la deuda nacional y en parte debido a la sensación de que la Casa Blanca está cediendo a las demandas demócratas.
El argumento de un estímulo fiscal adicional para reforzar la recuperación es fuerte, ante la disminución de las ayudas por desempleo y un resurgimiento de los casos del virus, que hasta ahora ha matado a más de 224.000 estadounidenses.
Esta semana, además, la publicación más relevante de datos económicos será la lectura preliminar del PIB del tercer trimestre de Estados Unidos el jueves. Las previsiones apuntan a un repunte récord del 31,9% tras la caída sin precedentes del 31,5% del segundo trimestre, ya que la pandemia del coronavirus ha arrasado la economía.
PETRÓLEO
Los precios del petróleo caen hoy, extendiendo las pérdidas de la semana pasada, ya que el aumento de casos de coronavirus en EE. UU. y Europa genera preocupaciones sobre la demanda de energía, mientras que la producción de rápido crecimiento de Libia también afecta los precios.
La referencia Brent baja un 2,6% a US$40,69 mientras que el barril WTI también pierde un 2,6% a US$38,80. Ambos contratos cayeron casi un 2,5% la semana pasada.
El creciente número de casos «no sólo resalta los riesgos que plantean las restricciones inmediatas al transporte, sino que también reduce las expectativas de demanda a largo plazo», dijo Eugen Weinberg, analista de Commerzbank.
Por el lado de la oferta, la Corporación Nacional de Petróleo de Libia (NOC) dijo que había levantado la fuerza mayor en el campo petrolífero El-Feel.
NOC dijo que la producción libia alcanzaría un millón de barriles por día (bpd) en cuatro semanas, un aumento más rápido de lo que muchos analistas habían pronosticado.
«En un entorno en el que hay nuevas preocupaciones sobre las perspectivas de la demanda, lo último que necesita el mercado en este momento es oferta adicional», dijo Warren Patterson, jefe de estrategia de materias primas de ING.
(The Wall Street Journal, Finviz, Investing, Markets Insider, Ámbito, 20 minutos, Valora Analitik).
—