El presidente de Colombia, Gustavo Petro, le pidió oficialmente la renuncia al ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, a través de una publicación en su cuenta de X en la que abogó por su inocencia a pesar de resultar inmerso en el escándalo de contratación en la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo de Desastres (UNGRD).
Bonilla ha sido mencionado en testimonios de personas implicadas en el caso que investiga la Fiscalía, como Olmedo López y Sneyder Pinilla, quienes contaron cómo funcionarios públicos y congresistas intercambiaron decisiones por contratos en la entidad.
La exasesora del ministro, María Alejandra Benavides, acusó al funcionario de estar al tanto de la intervención de congresistas para la asignación de recursos dirigidos a contratos de proyectos específicos en varias regiones del país.
Según la Corte Suprema de Justicia, congresistas de la Comisión Interparlamentaria de Crédito Público (CICP), encargada de revisar y dar aval a las decisiones de endeudamiento de la Nación, aceptaron emitir conceptos respecto de operaciones de crédito público presentadas por el Ministerio de Hacienda a cambio de contratos en la entidad.
Esto constituiría los delitos de cohecho impropio por acuerdos ilegales relacionados con sus funciones e irregularidades en la aprobación de proyectos y eventuales contrataciones en la UNGRD.
Esta semana, el Gobierno emitió un decreto para nombrar una ministra de Hacienda ad-hoc para reemplazar a Bonilla en cualquier decisión que tenga que ver con la Unidad de Gestión de Riesgo y con la reciente declaratoria de Desastre Nacional.
Helga María Rivas, la actual ministra de Vivienda, fue la designada para manejar estrictamente los temas que pasen por la cartera de Hacienda en los relacionado con aprobaciones de recursos y trámites para la Unidad de Gestión de Riesgo.
Hasta hoy, el ministro de Hacienda solo se había referido una vez al asunto por medio de sus redes sociales: “Aunque es un duro trance personal y un difícil y complejo camino jurídico aspiro, con instrumentos legales, a convencer a la justicia de mi país que eventualmente puedo cometer errores, pero no delitos”, escribió en X.
Este miércoles en su carta de renuncia, Ricardo Bonilla dijo que se retira con la frente en alto y confiado de convencer a los investigadores “que no compró silencios, ni votos de congresistas, ni cupos indicativos, ni cometí delito alguno en provecho personal”.
La ministra de Trabajo, Gloria Inés Ramírez, dijo, tras conocer la noticia “los ministros somos fusibles, vendrá otro que seguirá en ese proceso y ahí estaremos todos prestos a continuar hasta que el presidente considere. Seguiremos trabajando porque el Plan de Desarrollo, Colombia potencial mundial de la vida, se cumpla”.
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