El Producto Interno Bruto (PIB) de Estados Unidos se contrajo 0,6 % en el segundo trimestre, estuvo 0,3 puntos porcentuales por encima de la primera estimación (-0,9 %) anunciada a finales de julio.
Así lo informó este jueves el Departamento de Comercio, al señalar que la actualización refleja principalmente “revisiones al alza del gasto de los consumidores y la inversión en inventarios privados que se vieron compensadas en parte por una revisión a la baja de la inversión fija residencial”. Lea más en noticias económicas internacionales.
Es de recordar que en el primer trimestre la economía estadounidense había caído un 1,6 %.
La entidad indicó que la disminución del PIB real reflejó disminuciones en la inversión en inventarios privados, la inversión fija residencial, el gasto del gobierno federal y el gasto de los gobiernos estatales y locales, “que fueron compensados en parte por aumentos en las exportaciones y el gasto del consumidor”.
Entre tanto, las importaciones, que son una resta en el cálculo del PIB, registraron aumentos.
De acuerdo con el Departamento de Comercio, la disminución de la inversión privada en inventario estuvo liderada por una disminución en el comercio minorista, incidida, principalmente, por «otras» tiendas de mercadería general.
Por su parte, dijo que la disminución de la inversión fija residencial estuvo liderada por una disminución en «otras» estructuras: específicamente las comisiones de los corredores de bienes raíces.
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En lo que respecta a la disminución en el gasto del gobierno federal, el Departamento dijo que este reflejó una disminución en el gasto no relacionado con la defensa, el cual fue compensado, en parte, por un aumento en el gasto en defensa.
“La disminución en el gasto no relacionado con la defensa reflejó la venta de petróleo crudo de la Reserva Estratégica de Petróleo, lo que da como resultado una disminución correspondiente en los gastos de consumo”, indicó.
“Debido a que el petróleo vendido por el gobierno ingresa a los inventarios privados, no hay un efecto neto directo sobre el PIB. La disminución en el gasto de los gobiernos estatales y locales estuvo liderada por una disminución en la inversión en estructuras”, añadió la entidad.
El Departamento de Comercio indicó que el aumento de las exportaciones reflejó incrementos tanto en bienes como en servicios.
Suministros y materiales industriales lideraron el sector de bienes, mientras que los servicios fueron incididos por los viajes.
“El aumento en el gasto de los consumidores reflejó un aumento en los servicios (liderados por los servicios de alimentación y alojamiento, así como «otros» servicios) que fue parcialmente compensado por una disminución en los bienes (liderados por los alimentos y bebidas)”, señaló el Departamento de Comercio.
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Concluyó diciendo que el PIB en dólares corrientes aumentó 8,4 % a una tasa anual, o US$496.200 millones, en el segundo trimestre a un nivel de US$24,88 billones: “una revisión al alza de US$31.100 millones con respecto a la estimación anterior”.
