El nuevo presidente ejecutivo de Petrobras, Roberto Castello Branco, abogó por las desinversiones en los sectores de gas natural y refinación de la compañía.
El nuevo jefe de Petrobras dijo que el dominio interno de la compañía en la cadena de suministro de gas natural era malo para la empresa y malo para Brasil.
La firma estatal querría competidores en la industria nacional de refinación y siempre estuvo abierta a nuevas asociaciones, dijo.
Durante el evento de posesión en el cargo, el funcionario también criticó la intervención del Estado en la economía ya que esta “restringe la libertad, menor es el crecimiento y mayores son las oportunidades para distribuir favores; es la construcción de una fábrica de pobres”.
Castello Branco añadió que la elección de Jair Bolsonaro es un «hito histórico» y una oportunidad única para cambiar los rumbos de la economía brasileña.
(Con información de Reuters)