La transición energética es un término que ha venido cobrando cada vez mayor relevancia en los últimos años, debido al impacto positivo que tiene en el planeta. Lea más de energía.
Atendiendo a lo anterior, El Colombiano y Huawei llevaron a cabo este jueves, 14 de julio, el conversatorio “La digitalización: clave para la transición energética en América Latina” en un formato híbrido, con un evento presencial en la sede de este diario en el municipio de Envigado, y transmitido a la par a través de las redes sociales de cinco medios aliados: Valora Analitik, Vanguardia, El País, El Heraldo, Nuevo Día y El Universal.
En el marco del conversatorio, Ricardo Baquero Vergara, gerente nacional de la Organización de las Naciones Unidas para el Desarrollo Industrial (Onudi) del Proyecto Distritos Térmicos Colombia, explicó que, desde la vista de la Onudi, para promover la eficiencia energética y trabajar hacia la transición energética, en Colombia se requieren cambios institucionales, construir capacidades y una maduración del mercado.
En lo que atañe a lo institucional, Baquero subrayó que es necesario el desarrollo de reglamentos técnicos y estándares, así como la construcción de entornos normativos para hacer esa transición hacia la eficiencia energética.
Del mismo modo, cobra relevancia la construcción de capacidades mediante la formación de una fuerza laboral en torno a los servicios especializados que requieren los mercados de eficiencia energética. Por último, está la maduración del mercado, que se basa en la identificación de proyectos y oportunidades reales para ser apoyados o financiados en su ejecución.
La transición energética impacta el futuro del planeta y de la sociedad en general.
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Así las cosas, Baquero destacó que uno de los objetivos comunes entre los asistentes al Foro era la mitigación del Cambio Climático, y uno de los mecanismos que pueden ayudar a lograrlo es la reducción de los gases efecto invernadero.
En el marco de lo que vive el mundo actual, de cara a la pandemia de la Covid-19 y la guerra entre Ucrania y Rusia, entre otros factores, “una de las estrategias con mayor efectividad es encontrar la eficiencia energética en los puntos de generación, distribución y uso final de la energía eléctrica”, afirmó.
A juicio de Baquero, hay falta de información entre la industria y los grandes consumidores de energía, pues “no entienden muy bien cómo consumen la energía”. A la par, los sistemas de medición de consumo energético “son deficientes”.
Además, cree que la transición energética no se limita a cambios en las fuentes de energía, pasando de energías convencionales a renovables y limpias, sino que también es importante “entender que las emisiones que queremos controlar y mitigar, también pasan por el uso final de la energía”.
El papel de la tecnología
“Todas estas nuevas tecnologías, toda esta disrupción que estamos viendo en el sector energía, está llevando a que los usuarios finales tengan un papel mucho más importante en el consumo de energías”, destacó Alexandra Plana, especialista senior de Energía del Banco Interamericano de Desarrollo.
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Por su parte, Álex Santander, jefe de la división de políticas y estudios energéticos y ambientales del Ministerio de Energía de Chile destacó que la transición energética se basa en “grandes metas a largo plazo” y su país se ha puesto de acuerdo en eso.
“La tecnología es crucial para la autonomía energética, para las personas en los proyectos comunitarios, pero también la tecnología y la digitalización también es crucial para esa operación del sistema eléctrico altamente renovable que vamos a tener no en 100 años, sino en 10 o 15 años más”, destacó Santander.
“Vamos a tener un sistema mucho más distribuido con señales digitales yendo hacia un lado y hacia el otro. Por ende, la operación de las redes eléctricas va a tener que ser mucho más digital, mucho más automática, lo cual le va a dar soporte a evitar contingencias operacionales”, añadió Santander.
A su turno, el ministro de Minas y Energía de Colombia, Diego Mesa, aseguró que “el tema de la digitalización es fundamental como complemento de la política de transición energética”.
Para el jefe de la cartera de Energía en Colombia, “es fundamental” poder lograr la digitalización del sector eléctrico para recursos distribuidos, pero, sobre todo, para enfocarse en dos factores que son claves: optimizar la red eléctrica y empoderar al usuario.
Mesa señaló que es “clave” contar con la medición inteligente para optimizar el eslabón de la comercialización y facturación, “pensar que cualquier usuario en el futuro pueda cambiar de prestador de energía en la distribución como lo hacemos hoy con las telecomunicaciones, tanto telefonía como televisión, por ejemplo”.
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“Además eso va a traer una optimización en otros servicios como la medición. No tener cuadrillas, sino que todo se pueda hacer remotamente desde un centro de control. El objetivo final es poder empoderar al usuario, que pueda tomar decisiones informadas, que podamos tener internet de las cosas, inteligencia artificial, programar los electrodomésticos”, añadió el ministro de Minas y Energía.
Lo anterior, aseguró Mesa, está enmarcado dentro de la eficiencia energética, que, junto con las energías renovables, son los dos elementos que van a hacer posible la “descarbonización de la economía en los próximos años”, indicó.
La digitalización
Johann Heyl, regional senior product manager de Huawei explicó que, desde la compañía estiman que por lo menos el 90 % de las fuentes de generación renovables entre 2025 y 2030 van a ser de características digitales.
De acuerdo con Heyl, la digitalización es primordial porque “nos va a permitir un acceso mucho más simple a accesos remotos de nuestras instalaciones y, sobre todo, a obtener un cierto grado de transparencia, que nosotros consideramos fundamental”.
En lo que respecta a la inteligencia artificial, indicó que en Huawei estiman que más del 80 % de las plantas deberían operar con diferentes niveles de inteligencia artificial.
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“En Huawei utilizamos el concepto de machine learning y de big data -el almacenamiento de mucha información de diferente calibre-“, dice, pues son herramientas que emplea la compañía para los diferentes procesos que abarca.
Heyl destacó que en Colombia “se ve muy buena intención, como en todo Latinoamérica, de poner energía renovable”, sin embargo, advirtió que cobra relevancia que “las redes eléctricas estén preparadas para trabajar con esa condición”.
¿Cómo lograr la transición energética?
De acuerdo con Carlos Mario Cano, presidente de la Comisión de Integración Energética Regional (CIER), es clave no perder “el ímpetu” para hacer que la transición energética sea una realidad.
“No perder el ímpetu y siempre pensar en el equilibrio porque no es llegar por llegar, la transición tiene que ser paso a paso. Debemos impulsar mucho a los gobiernos, a los entes reguladores, que vean que tenemos que convivir en algún momento con los dos sistemas que tenemos y esa transición cuesta”, señaló Cano.
El presidente de la CIER destacó que el papel de todos los actores involucrados en la transición energética es el de impulsar: “Impulsar todo lo que sirva para la transición energética desde nuestro rango, desde nuestras redes sociales, siempre impulsar que hay que ayudar al medio ambiente y a la competitividad”, dijo.
Por su parte, el secretario ejecutivo de la Organización Latinoamericana de Energía (Olade), Alfonso Blanco Bonilla, destacó que, desde el rol de la Olade como organismo, es fundamental “apoyar el desarrollo de políticas públicas de largo plazo que se constituyan en políticas de Estado en términos de energía y que no sean susceptibles a los cambios de administración, sino que se constituyan en modelos del sector energético como parte del desarrollo energético de nuestros países, con esa visión de políticas de Estado profundas que también alienten la participación del sector privado”.
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Heyl, a su turno, coincidió con Cano, al señalar que es necesaria una participación activa de todos los actores de la transición energética para que esta progrese. “Necesitamos que todos los personajes estén participando en esto, que no se quede solamente en intenciones, sino que realmente podamos aunarnos para sacar grandes esfuerzos”, indicó.
