La oposición mayoritaria de Venezuela participará en las elecciones regionales de noviembre, buscando derrotar al chavismo en la disputa por las gobernaciones, alcaldías y demás puestos regionales que se definirán en esos comicios.
Esta es la primera vez desde 2015 que los principales partidos opositores aceptan ir a una contienda con el régimen de Nicolás Maduro, pues en ocasiones anteriores argumentaron que no había condiciones que garantizaran la transparencia de las elecciones.
La oposición tendrá candidatos bajo la sombrilla de la Mesa de Unidad Democrática (MUD), lo que significa que importantes colectividades como Voluntad Popular, Primero Justicia y Acción Democrática están respaldando esta determinación. (Ver más de Internacional).
Hay que decir que la decisión de respaldar la convocatoria a las urnas está enmarcada en los acercamientos con el oficialismo que se están llevando a cabo en México, con el respaldo de parte de la comunidad internacional, y que buscan soluciones a la crisis que vive el país.
“Sabemos que estos comicios no serán unas elecciones justas ni convencionales (…) Sin embargo, entendemos que serán un terreno de lucha útil para fortalecer a la ciudadanía”, detalló la Plataforma Unitaria a Venezuela en un comunicado.
Henry Ramos Allup, secretario general del partido Acción Democrática, consideró que “el mecanismo más expedito y más sencillo para participar, sobretodo cuando tenemos los partidos secuestrados, es llamando todos a votar por la tarjeta de la MUD”.
“Esta decisión nos convoca y exige lo mejor de todos, en unidad avanzaremos con firmeza”, detallaron en un comunicado. De esta forma, los opositores tendrán un día para inscribir a sus candidatos para la contienda que se celebrará el 21 de noviembre, pues el plazo límite de la convocatoria a cierra este primero de septiembre.
El Consejo Nacional Electoral tiene entre sus rectores a dos representantes de la oposición, lo que deja la proporción dentro de ese organismo en una representación de dos a tres (del oficialismo), una cuestión que da un vaho de confianza en la gestión que tendrá esa institución.
“Hemos llegado a la conclusión que hay algunas personalidades que solo le gustan las elecciones cuando ellos son candidatos. Aquellos que creen que la salida no es electoral y se las pasan dibujando ficciones en su imaginación, que impiden que lo lleven a cabo. Nosotros estamos trillando en el camino en el creemos”, sentenció Allup.
La mayoría de los partidos de oposición, a excepción de Causa R, ya confirmaron su participación en las elecciones. Incluso, Voluntad Popular, al que pertenecen Juan Guaidó y Leopoldo López, también estará en las elecciones.
Venezuela comienza a trazar unas elecciones históricas, pero la emergencia humanitaria compleja que ha obligado a más de cinco millones de personas a dejar el país sigue latente y la crisis política aún busca una solución.
En el pasado, cuando la oposición ganó alcaldías y gobernaciones en los comicios regionales, el régimen creó nuevos cargos de administradores especiales para los municipios que estaban en manos de partidos opositores, dejando sin funciones a los mandatarios locales que tenían ideologías diferentes.
Además, en la Asamblea Nacional (de corte oficialista) está en discusión un proyecto de ley para implementar un formato de estados comunales, que, a futuro, podría transformar las composiciones de los poderes regionales.
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