La Cámara Colombiana de la Infraestructura (CCI) alertó este martes por el incremento de precios que se vienen registrando en los insumos para desarrollar proyectos en el país.
De hecho, señala que el acero, el asfalto y el cemento están disparados desde 2021 y esto ya les viene pasando factura a las empresas del sector constructor.
De acuerdo con el Dane, entre enero de 2021 y mayo de 2022, el precio de estos insumos ha aumentado 65,7 %; 25,7 % y 9,8 %, respetivamente. Lea más Noticias de Infraestructura.
Como consecuencia de esto, el sector privado se está viendo afectado en la ejecución de los proyectos, “ya que los márgenes contemplados en la estructuración fueron superados por razones del mercado, geopolíticas y financieras”, dijo la CCI.
Y agregó que, en el caso de los contratos de obra pública, el incremento del valor de estos insumos tiene impacto en el alcance físico de los trabajos.
Teniendo en cuenta lo anterior, el gremio les pidió a las entidades contratantes implementar estrategias que permitan garantizar la terminación exitosa de las obras actuales y de los nuevos proyectos.
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Incluso, sugiere revisar y ajustar, acorde con el mercado, el listado de insumos y precios de forma previa a la contratación de nuevos proyectos.
Adicionalmente, recomienda incorporar fórmulas de reajuste de precios en los contratos para la adecuada gestión de los mismos.
Para la Cámara Colombiana de la Infraestructura, los factores que han generado el incremento de precios son los costos y materias primas asociadas a su producción.
Entre estos últimas se encuentran insumos energéticos (petróleo, carbón), chatarra, costos logísticos (fletes), inflación, mano de obra y tasa representativa del mercando.
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En particular, el dólar ha incidido directamente en los precios de los productos de la construcción.
Esto teniendo en cuenta que muchos de los bienes necesarios para las obras son importados, incluyendo las materias primas para la producción de otros insumos.
De igual forma, existen materias primas nacionales que se venden a precio internacional (en dólares), como es el caso de los combustibles y que, como respuesta a esta dinámica del mercado, también generan un aumento en los precios finales de los insumos.
