Cinco décadas después de cimentar una gran parte de vías, puentes y aeropuertos, Carlos Alberto Solarte, quien es quizá uno de los contratistas más grandes del país, estaría vendiendo algunas participaciones en los 10 megaproyectos viales que, hoy, están a su cargo.
Las investigaciones en su contra por Odebrecht serían, según fuentes cercanas a La República, los detonantes para que en este momento fondos de infraestructura y concesionarias estén dispuestas a comprar estos activos.
El lío por el que atraviesa el empresario y su hija (Paola Fernanda Solarte) podría convertirse en el ocaso de una historia empresarial que inició en los años 60, junto a su hermano Luis Héctor Solarte.
Tras estudiar ingeniería civil en la Universidad del Cauca y trabajar en las bodegas de su hermano mayor, el comienzo de su carrera data de 1966 cuando el dúo Solarte ganó su primera licitación: la construcción de una carretera de 10 kilómetros en el oriente de Nariño.
Desde entonces, el éxito empresarial de ‘Los Pastusos’, conocidos así en el sector de la construcción, quedó impreso en varias obras del centro y suroccidente del país. De hecho, según informaciones publicadas y recopiladas por medios, los dos hermanos hicieron parte de la primera generación de concesiones en 1995, cuando el expresidente César Gaviria dio el aval para que se iniciara una reestructuración vial en el país.
El pasado 6 de marzo, Valora Analitik reportó que el presidente de la Financiera de Desarrollo Nacional (FDN), Clemente del Valle, reconoció que hay menor apetito en la financiación de los proyectos por parte de la banca local como consecuencia del riesgo reputacional por temas como Odebrecht y la Ruta del Sol II.
Otro de los aspectos que fue un error en el pasado, dijo, fue permitir la concentración de un solo sponsor para la construcción de demasiados proyectos. Hoy en día, aseveró, algunos quieren vender sus participaciones para mejorar la estructura de sus negocios.
De la misma forma, Del Valle reconoció que hay menor apetito de la banca local por financiar los proyectos, a pesar de la aprobación de la Ley de Infraestructura en 2016 que les dio más garantías a esas entidades en caso de incumplimientos en los contratos.
En la entrevista con Valora Analitik, el funcionario reveló que algunas de las constructoras más grandes del país dijeron estar interesadas en comprar alguna participación o proyectos completos que ya fueron adjudicados.
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“Desde muy jóvenes los Solarte se quedaron con proyectos grandes, entre ellos, hay varios muy conocidos como las vías Pasto y Rumichaca, Girardot-Espinal-Neiva o Briceño-Sogamoso. Sin embargo, hoy están involucrados en las investigaciones de la Ruta del Sol II”, precisó Argelino Durán Ariza, presidente de la Sociedad Colombiana de Ingenieros.
Tras tener cerca de 12,3% de participación en las vías del país, según la Supertransporte, fue hasta hace un poco más de nueve años cuando se les adjudicó el contrato del consorcio Canoas, por el que hoy están investigados, y el que podría ser el detonante para que, en este momento, estén buscando salir de algunas participaciones.
Bajo sus cuatro firmas CSS Constructores S.A., CASS Constructores y Cía. SCA, Solarte Nacional de Construcciones (Sonacol S.A.) y la Organización Solarte y Cía. SCA, hoy el grupo está a cargo de 10 obras, según la ANI e Invías.
Las que tienen en 4G son: Autopistas Conexión Norte: Remedios-Zaragoza-Caucasia; Santander de Quilichao-Popayán; Santana-Mocoa-Neiva; la iniciativa privada (IP) Vía al Puerto; y Bucaramanga-Pamplona.
Las obras con el Invías son: Corredor del Sur; San Miguel-Santa Ana; la Perimetral de Mocoa; Túnel del Toyo; Carretera K15-Tierralta-San Pedro de Urabá y una participación en la terminación del Túnel de la Línea.
Sin embargo, aunque estos proyectos están en desarrollo, fuentes cercanas a LR confirmaron que “claramente uno de los que está vendiendo sus participaciones en estos proyectos es Solarte. Se están dando varios negocios para comprar participaciones y hay firmas nacionales y fondos de infraestructura internacionales interesados. Se está moviendo mucho el tema, sin embargo, las negociaciones se están haciendo en privado, por lo que es muy complejo conocer el avance de los negocios”. Sobre este tema se agregó: “en este momento los Solarte están pasando por un tema reputacional grave, que los está obligando a salir de esos proyectos”.
Pese a que estas negociaciones se estarían haciendo en privado, LR también conoció que varias empresas extranjeras son las más interesadas en participar en los proyectos 4G. Algunos nombres de firmas internacionales en la posible lista de compradores son: John Laing Capital Management (EE.UU.), Roadis (España), Globalvía (España), Marubeni Corporation (Japón), Abertis (España), y McQuaire (Estados Unidos), entre otros.
Otra de las empresas que no está en esta lista, pero que tiene músculo financiero y experiencia para hacerse a una de estas vías es Sacyr.
Un funcionario del sector legal resaltó, además, que en este momento los movimientos se darían en las obras 4G, porque hay concesionarios que tienen la incertidumbre de que se frenen los proyectos. Sin embargo, el proceso no sería fácil, debido a que como los Solarte cuentan con más de 25% de participación en las iniciativas, se tendría que buscar a una persona jurídica o natural con la misma experiencia.
Frente a estas negociaciones, se consultó al constructor Mario Huertas Cotes, quien aclaró que por el momento no ha considerado adquirir participaciones en otras concesiones, “pues estamos enfocados en culminar los tres proyectos actuales”.
(Con información de La República y Valora Analitik)
Foto: Tusemanario