Tras un fuerte aumento de 8,7 billones de dólares en el primer trimestre de 2018, la deuda global disminuyó en aproximadamente [content_control] 1,5 billones de dólares hasta 247 billones de dólares en el segundo trimestre de 2018.
Así lo reveló un reciente reporte del Instituto de Finanzas Internacionales (IIF, por su sigla en inglés). Ese comportamiento se explica principalmente por una disminución presentada en los sectores financieros y gubernamentales de los mercados maduros.
En un contexto de fuerte crecimiento global y mayores lecturas de inflación en los mercados emergentes y en algunos mercados maduros, esta disminución llevó la relación de deuda global/PIB a 317 % en el segundo trimestre.
Por otro lado, la deuda total en los mercados emergentes aumentó aún más en el segundo trimestre, aunque a un ritmo más lento que en el primer trimestre.
Ahora que alcanza los 71 billones de dólares (212 % del PIB de los emergentes), la deuda de los emergentes es cerca de 4,8 billones de dólares más que su nivel de 2017 y un aumento de 1 billón de dólares en el segundo trimestre de 2018, y China representa más del 80 % del aumento.
Los datos sugieren que la deuda total de China superó el 300 % en el tercer trimestre de 2018. La fuerte demanda externa de bonos chinos y los esfuerzos de las autoridades por apoyar la actividad nacional han contribuido a esta fuerte acumulación de deuda.
Por otro lado, el informe señaló que los mayores costos de endeudamiento no han sido tan disuasorios: en más de 187 billones de dólares, la deuda global (excluyendo el sector financiero) ha aumentado en alrededor 30 billones de dólares desde que la Fed comenzó a aumentar las tasas en diciembre de 2015.
Esto marca una aceleración sorprendente en el ritmo de la acumulación de deuda del ritmo más lento de 2012-2015 (solo un aumento de 1 billón de dólares).
El aumento ha sido más pronunciado en el sector de las empresas no financieras (hasta 13 billones de dólares), especialmente en la relación deuda/PIB del gobierno de los EE. UU., mientras que Alemania, Holanda e Irlanda registraron un fuerte descenso en deuda pública, más de 10 % del PIB.
Turquía y Filipinas han registrado el mayor aumento de la deuda corporativa no financiera/PIB desde 2015.
En los mercados emergentes, el aumento de los ratios de deuda de los hogares ha sido mayor en China, Líbano y Corea. El crecimiento de la deuda del gobierno general ha sido superior a 10 % en Brasil y Arabia Saudita.
En contraste, Ucrania, Hungría y Rusia han visto la mayor caída de deuda fuera del sector financiero. La disminución de la deuda pública fue más pronunciada en la República Checa y Hungría.
Finalmente, mencionó que unos 4 billones de dólares de bonos de emergentes y préstamos sindicados vencerán a finales de 2020, y un tercio de ellos son reembolsos en moneda extranjera.
Las necesidades de refinanciación del dólar son altas para Chile, Colombia, Egipto y Nigeria (casi el 75 % de los reembolsos), seguidos de México (68 %), Sudáfrica (62 %), Brasil (52 %) y Turquía (50 %).[/content_control][login_widget]