Desde el pasado 18 de julio, la vía Bogotá – Villavicencio se encuentra cerrada por la avalancha en Quetame, Cundinamarca. La situación dejó decenas de muertos y heridos, al tiempo que afectó a cientos de familias que vivían en esa zona y en la de Naranjal. Tan pronto como ocurrió la tragedia, las autoridades han buscado atender la situación.
En los últimos días, funcionarios están trabajando para rehabilitar el paso por la vía al Llano. Y el ministro de Transporte, William Camargo, ya dio detalles de cuándo podría habilitarse de nuevo el paso por la vía Bogotá – Villavicencio. El funcionario también explicó que la habilitación será intermitente y luego, sí, total.
Cuándo se reabrirá la vía Bogotá – Villavicencio
En entrevista con el diario El Tiempo, Camargo explicó que ya está transportándose un puente Bailey desde Tolemaida para instalalo en la zona afectada. Estas estructuras son puentes portátiles prefabricados, pensados para uso militar, aunque no exclusivamente para eso.
“Podríamos estar habilitando un paso intermitente el próximo viernes 28 de julio”, dijo Camargo a El Tiempo. Es decir, en poco menos de siete días, volvería a haber paso en la vía Bogotá – Villavicencio.
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“Sería un paso alternado para los dos sentidos de tráfico y eso nos permitiría conectar con alguna restricción de capacidad temporal”, dijo el funcionario.
Dos semanas después de eso, agregó, “tendríamos habilitada la otra calzada, el otro puente. Eso nos permite tener la operación con infraestructura temporal habilitada en las próximas tres semanas y media”.
Los puentes Bailey que se instalarán en la vía Bogotá – Villavicencio tienen capacidad de hasta 52 toneladas. Y, según el ministro Camargo, servirán para el paso tanto de pasajeros como de carga, sin restricciones.
Sobre los tiquetes aéreos
En la misma entrevista, el ministro Camargo también habló de las medidas tomadas por el Gobierno Nacional, respecto al transporte aéreo, mientras se rehabilita el paso en la vía Bogotá – Villavicencio.
“Se definió un piso mínimo que a la fecha está en $250.000 para Satena y para las aerolíneas comerciales está entre $400.000 y $500.000”, indicó. Sobre Satena agregó que se implementó un puente aéreo para que la aerolínea preste servicios adicionales.
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De un eventual control a las tarifas, Camargo aseguró que ese tema es del resorte de la Aerocivil, encargada de evaluar los costos de eventos como el derrumbe en Quetame en la canasta aeroportuaria.
“Mientras restablecemos el tráfico completo, podríamos tener despachos desde Bogotá hasta el sector de El Naranjal, donde los vehículos se devolverían, y de Villavicencio al sector del El Naranjal”, afirmó.
