El ministro de Hacienda de Colombia, Ricardo Bonilla, se refirió este miércoles a la polémica en torno al metro de Bogotá y si este tiene o no estudios definitivos.
A pesar de que expertos han mencionado que el megaproyecto contratado -que se construirá de forma elevada- ya avanzó en este frente, el funcionario se sumó al presidente Gustavo Petro y aseguró que esto es falso.
En sus declaraciones a medios, afirmó: “Lo que está claro es que sobre el metro subterráneo hay estudios de detalles desde el año 2014 y sobre el aéreo no hay estudios de detalle”.
A renglón seguido, afirmó que sería posible cambiar el metro de Bogotá, de tal modo que una parte sea subterránea, tal y como ha querido el presidente Petro.
Sobre esto, Bonilla dijo que los avances que registra el contrato de concesión se han dado en las obras del patio taller en Bosa y la estación de la Calle 72, en el noroccidente de la ciudad.
“Estos sirven para cualquier metro, ya sea aéreo o subterráneo”, añadió el ministro de Hacienda.
Posteriormente, reiteró que, hasta este momento, todavía no hay estudios de ingeniería de detalles del metro elevado: “No han sido entregados, tienen ya un desfase de tiempo bastante grande, y no hay un solo pilote construido”.
De allí que repitiera lo dicho por Petro desde China, en el sentido de que sería viable -técnica y financieramente- cambiar el megaproyecto del metro de Bogotá.
Petro, el ministro de Hacienda y el metro de Bogotá
De hecho, el jefe de Estado dijo desde el país asiático que sería “una tontería” no hacer el ajuste en dicha iniciativa, teniendo en cuenta que el Gobierno está dispuesto a poner todos los recursos.
El presidente se pronunció luego de las reuniones sostenidas con directivos de las empresas Xi’an Metro Company Limited y China Harbour Engineering Company Limited, que ejecutan la construcción de la primera línea del metro de Bogotá.
Petro afirmó que “técnicamente, la obra se puede desarrollar en la primera línea en dos fases: una elevada y otra subterránea”.
Y agregó que el megaproyecto se estructuraría utilizando los estudios adelantados durante su alcaldía y los que se han hecho en las siguientes administraciones. “No implicaría mayores demoras”, añadió.
En todo caso, dejó claro que las elecciones regionales de 2023 serán clave para determinar si esto es viable o no, ya que el próximo alcalde de Bogotá también deberá tomar esta decisión.
En todo caso, es importante señalar que, según el Distrito y la Empresa Metro de Bogotá, el megaproyecto elevado sí tiene ya los estudios definitivos, por lo cual ya pudo entrar a su fase de construcción.
En tanto, expertos del sector han planteado que el proyecto subterráneo no cuenta con la ingeniería de detalle, tal y como han dicho Petro y el ministro de Hacienda.