El ministro Ricardo Bonilla afirmó que el Gobierno Petro no presentará una nueva reforma tributaria, sino que prepara un plan de alivios tributarios de cara a la reactivación económica para Colombia.
En primera instancia, el jefe de cartera reconoce las dificultades que presenta el país en temas macroeconómicos, sin embargo, considera que «se está recuperando» y que el recaudo en IVA está creciendo alrededor de 4 % real.
El Gobierno Petro semanas atrás ordenó un recorte en el presupuesto, frente a ello en entrevista con El Tiempo, el ministro explicó: «Ese ahorro, ese recorte del presupuesto, es lo que en estos momentos se estima necesario y suficiente frente a la reducción que ya se vio que no íbamos a obtener en el recaudo tributario del impuesto de renta corporativo de grandes contribuyentes».
Ahora bien, si los $20 billones que se dieron de baja por cada entidad del Estado son suficientes o no, el ministro dice que «por ahora es lo que se necesita» y que continuarán evaluando el comportamiento del recaudo en lo que resta del año para saber si hacia el mes de octubre es necesario aplicar alguna medida de caja.
Ministro de Hacienda niega nueva reforma tributaria
Asimismo, se le preguntó por un tema que ha estado en el centro de la discusión: una nueva reforma tributaria.
Bonilla dijo que: “No es una reforma tributaria en el sentido preciso. Es un proyecto de reactivación de la economía, en el cual estamos previendo algunos artículos tributarios que están dirigidos más a generar estímulos al crecimiento que a fortalecer ingresos”.
En cuanto a los alivios tributarios, detalló que trataran de: “Reducir la tasa nominal del impuesto de renta corporativo, bajarla del 35 % – que está hoy – al 30 % e introducir algunos estímulos para el desarrollo turístico de áreas de menor desarrollo del país y finalmente fortalecer el certificado de reembolso tributario para estimular algunas exportaciones”.
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Inflación y las expectativas del Gobierno
En la entrevista, el ministro expresó su expectativa de continuar reduciendo la inflación e incluso llegar al 5 %.
“En la perspectiva de que este año, todos los datos dicen que podríamos llegar a una inflación de 5 %. La inflación de junio del año pasado terminó en 0,30 % Este año las proyecciones que existen son para que tengamos una inflación alrededor de 0,24 %, lo cual quiere decir que la tasa bajaría de 7,16 % a 7,10 % al finalizar el mes de junio y en el segundo semestre”.
Las tasas no bajan a la velocidad que se quiere
Por otro lado, se le preguntó al ministro de Hacienda por la intención del Banco de la República de continuar bajando las tasas de interés.
Bonilla dijo: «Lo que es claro con los miembros de la junta directiva del Banco es que ya no existe resistencia a bajar tasas. Saben que es una necesidad, que la tasa real en Colombia está muy alta y que la inflación no se va a volver a disparar. Lo que está en discusión con los miembros de la junta es en qué proporción se bajan las tasas. La tasa de intervención debería terminar este año entre 8,5 % y 8,25 %».
Expectativas para la economía
El ministro prevé un aumento en la proyección de crecimiento de la economía. La proyección inicial era de 1,5 %, pero según datos del DANE, “se permite pensar optimistamente que podríamos alcanzar un 1,7 % en 2024 y superar el 3 % en 2025”
Por otro lado, la calificadora de riesgos Moody’s rebajó la perspectiva de estable a negativa.
El ministro frente a este tema dijo: “La calificación de inversión la sigue manteniendo. Lo que dice es que, contra los compromisos que tiene el país en materia de pagos de créditos y el bajo crecimiento que hay, a duras penas este año terminaríamos en 1,7 %. Podríamos tener algunas dificultades y por eso cambia la perspectiva de estable a negativo”.
En cuanto a la flexibilización de la regla fiscal, el ministro comentó: «Lo que vamos a plantearle al Congreso es adelantar la aplicación de la regla fiscal, que, tal como está prevista hoy, debe aplicarse en 2026, para adelantarla a 2025. Adelantaremos el cumplimiento de la regla fiscal un año».
Lo anterior bajo el “horizonte que estamos cubriendo la deuda y con el comportamiento macroeconómico de la economía. Eso nos da un espacio para garantizar que cumplimos con el déficit primario, con el déficit fiscal y podemos mantener el tamaño de la deuda alrededor del umbral de 55 %”.
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