Según datos del PMI recogidos por el banco Davivienda, en julio de 2020 el sector industrial colombiano siguió recuperándose tras el confinamiento, ya que tanto la producción como los nuevos pedidos se vieron fortalecidos por segundo mes consecutivo, mientras que la actividad de compras continuó creciendo.
Sin embargo, dijo el banco en su informe, el empleo volvió a caer por cuarto mes sucesivo como consecuencia de las iniciativas encaminadas a reducir el exceso de capacidad.
Por su parte, la confianza empresarial se debilitó, pues las empresas expresaron su preocupación por el incremento de los contagios y la posibilidad de que con un nuevo confinamiento la situación empeorara.
El Índice de Gestión de Compras (PMI) del sector industrial colombiano de Davivienda, ajustado por factores estacionales, disminuyó de 54,7 puntos en junio a 54,2 en julio, lo que indicó una nueva mejoría en las condiciones del sector industrial.
De hecho, la cifra fue la segunda más alta desde enero de 2016, destacó.
Las empresas incrementaron sus niveles de producción por segundo mes consecutivo durante julio, dijo el banco Davivienda, gracias a que la economía continuó recuperándose tras el confinamiento impuesto en el país como consecuencia de la enfermedad por coronavirus 2019 (Covid-19).
El informe indica que el esfuerzo del Gobierno para reactivar la producción industrial facilitó la reapertura de las empresas y el incremento de la producción al ritmo más rápido en cuatro años y medio.
A pesar de ello, dice, el crecimiento en junio y julio no ha sido suficiente para que el sector recupere los niveles de producción previos a la Covid, y las expansiones siguen siendo limitadas en comparación con el descenso previo de la actividad.
Además, el documento del banco muestra que el empleo aún no ha aumentado y, de hecho, los datos más recientes señalan una ligera caída en las cifras laborales durante julio.
Asimismo, en este período de encuesta, las empresas contaron en general con capacidad suficiente para gestionar los trabajos pendientes y atender los nuevos pedidos.
Lea también: Colombia, con la caída más fuerte en producción industrial desde enero de 1991
En lo que respecta a la demanda, los industriales observaron un sólido incremento de los nuevos trabajos al comienzo del tercer trimestre, “gracias al fortalecimiento de la confianza empresarial tras la reapertura de la economía”.
Sin embargo, el ritmo de crecimiento se ralentizó con respecto a la lectura de junio, advirtió Davivienda, ya que algunos encuestados observaron que las ventas permanecieron escasas debido a la pandemia.
La persistente preocupación en torno a la Covid-19 afectó negativamente la percepción empresarial en julio, citó el informe puesto que la perspectiva de la actividad futura empeoró por primera vez en tres meses.
En particular, el pesimismo se vinculó con el aumento continuo de los contagios, que aviva el temor a un segundo confinamiento.
En cualquier caso, dijo Davivienda, la mayoría de empresas confía en un aumento de la producción durante los próximos 12 meses, a pesar de la preocupación por la estabilidad de la economía a largo plazo tras la pandemia.
Compras y precios
Por su parte, el incremento de los nuevos pedidos impulsó un aumento de la actividad de compras por segundo mes consecutivo en julio de 2020, lo cual propició un repunte (aunque tan solo marginal) del inventario de insumos.
Además de esto, muchas empresas mencionaron que las restricciones en las carreteras volvieron a ralentizar el transporte de insumos, lo que amplió de forma pronunciada los plazos de entrega en relación con la cifra de junio.
Con respecto a los precios, la presión volvió a ser intensa en el último período de encuesta, dado que los costos de insumos volvieron a subir como consecuencia del aumento de los precios de los proveedores y la fortaleza del dólar estadounidense.
Tema relacionado: En junio, Índice de Confianza del Consumidor en Colombia tuvo leve recuperación
En este sentido, también se recibieron comentarios de algunos encuestados que vinculaban la escasez de suministros con el reciente incremento de los precios.
Como consecuencia de ello, las empresas trasladaron los costos a los consumidores subiendo los precios de producción “de forma notable y a uno de los ritmos más rápidos observados en los últimos tres años”, advirtió el banco.
Con respecto a la encuesta del PMI Manufacturero colombiano, Andrés Langebaek Rueda, director ejecutivo de Estudios Económicos de Davivienda, afirmó: “El PMI manufacturero para Colombia se mantuvo en julio por encima de los 50 puntos a pesar de que en algunas ciudades del país se reestablecieron las cuarentenas y restricciones a la movilidad”.
Agregó que, a pesar de la leve disminución del indicador en el último mes, probablemente el país seguirá perteneciendo al número de países cuyo PMI está por encima de ese límite crítico de 50.
Recomendado: Desempleo en Colombia llegó al 19,8 % en junio, mejora frente a mayo
Lo sucedido con el PMI coincide con el índice de confianza del consumidor que a pesar de los nuevos confinamientos también registró un buen resultado en julio.
Como es apenas natural, dijo, debido a la todavía débil demanda, el empleo en el sector sigue disminuyendo, aunque a un menor ritmo del observado en los cuatro meses anteriores.
“Es muy probable que esta variable deba esperar hasta finales del año para mostrar crecimientos positivos», concluyó.
El informe completo de Davivienda se puede descargar aquí.
—