En el Congreso ya está radicado el proyecto de Presupuesto General de la Nación (PGN) para 2024. El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, lo radicó este sábado 29 de julio. Y al leer el documento de 714 páginas trasciende la importancia que tiene, para el presupuesto de Colombia, que será de $502,6 billones, el próximo año, la transición.
Pero el PGN no habla solo de la transición energética. Por el contrario, esa es una de las tres transiciones planteadas como argumento para definir el gasto estatal el próximo año. Las otras dos son la transición productiva y la fiscal.
“Con el Presupuesto General de la Nación se apoya una interacción ordenada de la transición energética justa y la transformación productiva que genere valor, riqueza y bienestar para todos los colombianos”, explicó el Ministerio de Hacienda, al comunicar la radicación del presupuesto en el Congreso.
Transiciones en el Presupuesto General de la Nación
Transición energética
De acuerdo con el proyecto radicado por Bonilla, el presupuesto “busca saldar la deuda social histórica del país con los más vulnerables en el mercado de la estabilidad macroeconómica y la sostenibilidad de las finanzas públicas”.
Lo primero, entonces, que menciona es la transición energética. Esta está centrada en cinco ejes: inversiones en energías limpias y descarbonización; sustitución progresiva de la demanda de combustibles fósiles; eficiencia energética; flexibilización de la regulación para las energías limpias, y la reindustrialización de la economía.
Así, el presupuesto priorizará “el uso de recursos energéticos locales, garantizando a su vez la estabilidad y el respaldo del sistema eléctrico a través de la implementación de sistemas de almacenamiento y el uso de fuentes renovables para la sustitución progresiva y segura de las plantas termoeléctrica”. De esta forma se buscaría el desarrollo de energías eólica, solar, geotérmica, biomasa y otras no convencionales.
Transición productiva
“La baja productividad y la escasa diversificación de las actividades productivas son una enfermedad crónica de nuestra economía”, dice el presupuesto general de la nación. Y agrega que, por eso, está “formulado para impulsar una transformación productiva”.
Un punto clave es que hace un llamado al sector y el mercado para “ser los principales promotores de esta transición productiva. En 2024 el gasto del Gobierno nacional sin deuda pasará de 19,2 % del PIB en 2023 a 20,5 % del PIB (…) Este gobierno no pretende estatizar la economía colombiana. La empresa privada seguirá siendo la que más contribuya a la creación de riqueza en el país”.
Transición fiscal
La tercera transición que menciona el presupuesto es la fiscal. Asegura que “se sustenta en el cumplimiento de la regla fiscal, con el fin de reducir los altos niveles de deuda y déficit. La consolidación fiscal servirá de base para apoyar los aportes del PGN relativos a la puesta en marcha de los ejes de transformación social y productiva definidos en el Plan Nacional de Desarrollo”.
En las proyecciones del Presupuesto General de la Nación, se habla de un déficit fiscal de 4,4 % del PIB en 2024. Además, plantea que el balance primario pase de 0 % del PIB en 2023 a 0,2 % en 2024. “Con ello, la deuda neta de activos financieros del GNC ascendería a 57,1% del PIB para descender a partir de 2025”.
De cuerdo con el proyecto, el mayor reto fiscal es el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles. “Con el fin de reducir este déficit hemos adoptado un proceso de ajuste gradual de precios de los combustibles líquidos”, recuerda.
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Los pormenores del Presupuesto General de la Nación
Los $502,5 billones del Presupuesto General de la Nación en 2024 se dividirán así:
- $55 billones: gastos de personal.
- $13,7 billones: adquisición de bienes y servicios.
- $237,6 billones: transferencias.
- $1,8 billones: gastos de comercialización y producción.
- $1,2 billones: gastos por tributos, multas, sanciones e intereses de mora.
- $0,7 billones: adquisición de activos financieros.
- $0,3 billones: disminución de pasivos.
- $94,5 billones: pago del servicio de deuda.
- $97,7 billones: inversión.
Por su parte, las partidas presupuestales que, según el proyecto radicado, tendrán mayor incidencia son:
- Salud, educación, agua potable y propósito general a través del Sistema General de Participaciones: $70,5 billones.
- Pensiones: $57,4 billones.
- Aseguramiento en salud: $35,3 billones.
- Otras transferencias para educación: $21,3 millones.
- Fondo de Estabilización de Combustibles: $15,5 billones.
- Sentencias y conciliaciones: $1,7 billones.