La Unión Europea (UE) ha decidido suspender durante 90 días la implementación de las medidas arancelarias en contra Estados Unidos, en respuesta a los aranceles impuestos previamente por Washington sobre productos europeos. Esta medida busca dar espacio a las negociaciones bilaterales y evitar una escalada en las tensiones comerciales.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, anunció que, aunque la UE había finalizado la adopción de las contramedidas con fuerte apoyo de sus Estados miembros, se ha optado por una pausa temporal para facilitar el diálogo diplomático.
“Tomamos nota del anuncio del presidente Trump. Queremos darles una oportunidad a las negociaciones”, declaró von der Leyen.
Y agrega: “Si las negociaciones no son satisfactorias, se aplicarán nuestras contramedidas. Continúan los preparativos para nuevas contramedidas. Como ya he dicho, todas las opciones siguen sobre la mesa”.
Pausa de aranceles por negociaciones
Esta decisión se produce tras el anuncio del presidente estadounidense, Donald Trump, de suspender temporalmente la aplicación de nuevos aranceles, reduciendo las tarifas al 10 % para más de 75 países en negociación, aunque excluyendo a China, que enfrenta aranceles del 125 %.
Recomendado: Laura Sarabia sobre relación con China: “No buscamos reemplazar a EE. UU., sino diversificar relaciones”
Trump sacudió los mercados el miércoles cuando reveló la reducción de las nuevas tasas arancelarias a las importaciones de la mayoría de los socios comerciales de Estados Unidos al 10% durante 90 días para permitir las negociaciones comerciales.
Las contramedidas de la UE, que incluían aranceles del 25 % a exportaciones estadounidenses valoradas en 21.000 millones de euros, estaban programadas para implementarse en tres fases entre abril y diciembre. Sin embargo, la Comisión Europea ha decidido posponer su aplicación para dar una oportunidad a las negociaciones.
La UE continúa insistiendo por el libre comercio y está dispuesta a entablar un diálogo constructivo con Estados Unidos para encontrar una solución que evite perjuicios innecesarios a ambas economías. No obstante, Von der Leyen advirtió que, si las conversaciones no avanzan, las medidas se aplicarán como estaba previsto.
Esta pausa estratégica refleja la voluntad de ambas partes de evitar una escalada comercial mediante el diálogo, en un contexto de incertidumbre geopolítica y económica. La UE sigue abierta a colaborar con la Administración estadounidense para encontrar una solución negociada, recordando que sus nuevas medidas pueden anularse en cualquier momento.
—