El 51 % de las personas consultadas por Ipsos en una encuesta aseguraron que 2024 fue un mal año para ellos y su familia, según el reporte de predicciones 2025 de Ipsos Global Advisor, una cifra inferior a la de los últimos dos años, aunque sigue representando a la mitad de los encuestados.
La encuesta se llevó a cabo en 31 países, entre ellos Colombia, donde, en línea con el resultado global, el 49 % de las personas señalaron que estaban de acuerdo con la idea de que no les fue bien el año pasado, exactamente la misma proporción que contestó de manera afirmativa en 2023.
Fuente: Ipsos Global Advisor.
Y el porcentaje de quienes creen que fue un mal año para su país es aún más alto en ambos casos: el promedio mundial se ubicó en 65 % (5 puntos porcentuales por debajo de 2023) y en Colombia fue del 63 % (también se redujo 9 pp).
La perspectiva para 2025 es más alentadora. En el mundo 71 % de los encuestados son optimistas y esperan una mejora (88 % en el caso de Colombia, la segunda más alta del ranking) y el 51 % prevé que la economía global será más fuerte (53 % en el país).
“Sin embargo, el optimismo para el nuevo año aún no ha regresado a los niveles previos al COVID”, señaló Ipsos Global Advisor, pues antes de 2020 tres de cada cuatro personas pensaban que el próximo año sería mejor.
Aun así, el 79 % en el mundo y el 77 % en Colombia anticipan que los precios en su país aumentarán más rápido que los ingresos de las personas, una cifra sin cambios desde 2022. En consecuencia, el 70 % de los encuestados en general y el 72 % de los colombianos esperan que la inflación sea más alta este año.
Fuente: Ipsos Global Advisor.
Del mismo modo, las expectativas de mayores impuestos se mantienen sustanciales en un 74 %, lo cual es consistente con los hallazgos del año anterior. En Colombia, quienes ven probable que haya mayores tributos son el 79 %, después de todo, el Gobierno anticipó que insistiría con conseguir en el Congreso el aval de la ley de financiamiento después de ver cómo se hundía la iniciativa al final de 2024.
Otra de las grandes preocupaciones advertidas por la encuesta es el desempleo. El 68 % de las personas en el mundo cree que este año será más alto que el anterior, para Colombia la cifra es del 69 %, a pesar de que el indicador ha venido disminuyendo en los últimos meses.
La única excepción a estas percepciones relativamente estáticas de la economía se ve en las tasas de interés. Las expectativas de que sean más altas en 2025 han disminuido a nivel mundial, con un 61 % de los encuestados anticipando un aumento, cuando en 2023 era del 70 %.
En Colombia, sin embargo, la participación de los encuestados que opinan que la tasa de intervención será mayor sube al 70 %, un escenario intermedio si se compara con otros países latinoamericanos. Perú (72%) y México (75%) lideran las expectativas de aumentos en la región.
“Si bien estas medidas son necesarias para controlar la inflación, también limitan el acceso al crédito y frenan el consumo. Una estabilización en este aspecto podría dar paso a un 2026 más favorable. El descenso en las expectativas de aumento de tasas de interés podría ser una luz al final del túnel”, señaló Ipsos.
Fuente: Ipsos Global Advisor.
El informe de Ipsos Predicciones 2025 ofrece una visión global y local de las expectativas para el nuevo año. El panorama económico refleja las tensiones que se viven en todo resto del mundo, aunque con matices particulares en cada país.
Los resultados dan cuenta de una mezcla de factores globales y locales. En el ámbito internacional, la persistente inflación, los rezagos de las políticas monetarias pospandemia y las tensiones geopolíticas han limitado el crecimiento económico. En el caso colombiano, años de ajustes tributarios y volatilidad en los precios de bienes básicos han exacerbado la percepción de incertidumbre.
Ipsos concluyó que 2025 cerrará con una economía global que sigue enfrentando retos importantes, pero también muestra algunos indicios de cambio. “Para Colombia, el desafío estará en equilibrar la carga tributaria, incentivar la inversión y generar empleo, para que las cifras de optimismo puedan finalmente traducirse en una mejor calidad de vida para sus ciudadanos”.
