A pocos días de finalizar septiembre, la vicepresidenta Kamala Harris, quien busca la presidencia de Estados Unidos y ganarle al republicano Donald Trump, habló sobre su programa económico para la clase media.
Mientras que Trump se muestra preocupado y a favor de beneficiar a los millonarios, Harris abordó cómo aportará para mejorar la economía de los hogares, brindar subsidio a las empresas que generen ‘buenos empleos’ y permitan crear sindicatos.
“No tenemos que vernos limitados por la ideología. En vez de eso, tenemos que buscar soluciones prácticas”, expresó Hamala Harris en su discurso dado en Pittsburgh, donde además se declaró capitalista.
“He prometido que desarrollar una fuerte clase media será la meta que defina mi presidencia”, agregó la demócrata, acentuando su creencia en mercados libres y en “una alianza activa entre el gobierno y el sector privado.
Cabe destacar que Pittsburgh es una ciudad de Pensilvania donde Kamala requiere juntar votos, pues, aunque hay gran cantidad de republicanos que apoyan a Trump, les preocupan asuntos económicos y están en disposición de escuchar a Harris.
Mientras que el expresidente que busca volver a la Casa Blanca promete un aumento generalizado de impuestos, intervenir en las decisiones de la Reserva Federal (FED) y deportar a los migrantes que no estén documentados.
Las políticas económicas de Harris se han centrado en cuestiones importantes para los votantes de clase media, como la asistencia sanitaria asequible, la vivienda y el cuidado de los niños, por ello su presencia en las ciudades para presentar sus propuestas ha sido clave.
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Durante el mandato de Biden la economía ha crecido un 8,4 %, se han creado 15,7 millones de puestos de trabajo, según el diario El País, pero recuperarse de la alta inflación que ha tenido Estados Unidos en los últimos tres años ha sido un proceso complejo.
Por ello, desde que Biden renunció a las elecciones presidenciales del presente año y en su lugar quedó Harris, una encuesta publicada por el Financial Times, asegura que la demócrata ya ha sobrepasado a su rival como la candidata en quien los estadounidenses confían más en pro de la economía nacional, por un 44 % frente a un 42 %.
Los sueldos crecen por encima de la inflación y la reducción de las tasas de interés después de cuatro años se ve reflejada en la solicitud de créditos para comprar vivienda.
Un sondeo de la Universidad de Michigan encuentra que el sentimiento de los consumidores sobre la buena marcha de la economía ha subido 40 puntos porcentuales con respecto a su punto más bajo, en junio de 2022.
Siendo así, la candidata demócrata luchará por el alza de precios de vivienda, y facilitará el acceso a ese sector de la economía. Para ello, busca dar US$25.000 a quienes buscan su primer hogar y crear más espacios para vivir.
También contempla desgravaciones fiscales por cada niño que tenga un hogar.
