Por: Adriana Hurtado Uriarte, Executive Director Inversiones Inmobiliarias en Credicorp Capital
¿Por qué en Colombia el mercado inmobiliario en los 80 y 90 era más dinámico que en el 2023? Muchos en el sector nos preguntamos esto y la respuesta puede estar más ligada a un tema cultural, que a factores de mercado. Durante esos años, Colombia fue un país con una inflación bastante alta por lo que comenzó a formarse el pensamiento de que los bienes raíces eran la forma más segura de proteger el patrimonio en el largo plazo: un ahorro que se pudiera proteger de la inflación y valorizar al mismo tiempo.
Ahora bien, si actualmente estamos en un contexto de alta inflación y, en teoría, esta sigue siendo la mentalidadde las personas ¿Por qué vemos los niveles más bajos de los últimos años? ¿Sigue valiendo la pena invertir en el mercado inmobiliario colombiano?
Recomendado: Razones para invertir en el mercado inmobiliario de Medellín
Desde la subida de las tasas de interés en el tercer trimestre del 2022, el panorama para el sector se ha oscurecido por lo cual las oportunidades de hacer nuevas inversiones se han reducido. A esto se suma la incertidumbre producto de las coyunturas mundiales, y la competencia por conseguir los recursos de los inversionistas.
La actualidad
Colombia y la Región los fondos e inversiones inmobiliarias están compitiendo con inversiones como renta fija o los CTDs con tasas de 15% a tres años. Sin embargo, esto obedece al contexto de altas tasas y una vez estas empiecen a bajar, las rentabilidades serán menores, mientras que las de los fondos podrían llegar a ser superiores.
Por otra parte, el sector también se ha visto afectado debido a cuestionamientos sobre si este tipo de activos en realidad sí representan una protección del patrimonio, o con la llegada de algún evento disruptivo, todo puede cambiar. No obstante, con el paso del tiempo hemos visto cómo después de estos eventos, los inmuebles tienden a valorizarse, asegurando una rentabilidad importante al inversor. Caso concreto, es la recuperación en las valoraciones de los fondos inmobiliarios en los últimos meses.
Esta valorización en el tiempo no se puede dar sin la confianza. La confianza es un ingrediente crítico en cualquier relación comercial, y el mercado inmobiliario no es la excepción. Por lo cual, hay que trabajar en un desarrollo profesional de los portafolios con valorizaciones ajustadas a la realidad e implementar otras estrategias de forma proactiva que generen un entendimiento adecuado de este tipo de activos y se envíen señales de confianza y transparencia a los inversionistas.
Como parte de esto, hay que trabajar en una estrategia de inversión basada en activos bien ubicados, en espacios únicos y con diversificación de arrendatarios, para que al final, en momentos complejos haya un activo con una mayor resiliencia que van a atraer más personas en los siguientes años y genera al inversionista más valor, mayores rentas y, por consiguiente, tranquilidad.
A pesar de los desafíos actuales, el futuro se vislumbra positivo a mediano y largo plazo. En 2024, desde Credicorp Capital estamos esperando que, sumado a una disminución en la inflación y la mejora de las condiciones macroeconómicas, las tasas de interés empiecen a bajar1, lo cual será positivo no solo para la economía sino también para el sector.
