La inflación en Estados Unidos estaría volviendo a su curva descendente. Así lo afirmó este martes el presidente de la Reserva Federal (FED), Jerome Powell.
Pese a esto, antes de tomar decisiones respecto a las tasas de interés, la entidad fue clara en que requerirá más datos que confirmen ese resultado bajista.
En un panel en el Foro del Banco Central Europeo sobre Banca Central en Sintra, Portugal, Powel destacó los esfuerzos de la FED para contener la inflación. “Debido a que la economía estadounidense es fuerte y el mercado laboral es fuerte, tenemos la capacidad de tomarnos nuestro tiempo y hacerlo bien”, dijo.
Desde julio del año pasado, la autoridad monetaria ha mantenido la tasa de interés entre el 5,25 % y 5,5 %, el nivel más alto en los últimos 23 años. Pero a diferencia de ocasiones anteriores, hoy el organismo tiene mayor confianza en que la inflación está en una trayectoria sostenida de regreso al objetivo del 2 %.
Inflación en Estados Unidos llegaría a su meta
En una publicación reciente, Bloomberg destacó que tras la falta de tras la falta de avances hacia el objetivo del banco central en los primeros meses de 2024, los datos publicados la semana pasada mostraban un panorama más prometedor.
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“La medida de inflación subyacente preferida por la Reserva Federal subió solo un 0,1 % en mayo, el menor incremento en seis meses”, dijo la agencia informativa.
Para Powell, el último reporte sobre inflación “sugiere que estamos volviendo a una senda de desinflación (…) Lo que nos gustaría ver son más datos como los que hemos visto recientemente”.
El consenso de los analistas sugiere que el banco central de Estados Unidos podría estar recortando las tasas hacia septiembre de este año, luego de perder la esperanza de que esto pasara a mitad de año, como algunos habían anticipado.
“La economía estadounidense se ha mostrado notablemente resiliente en medio de los altos costos de endeudamiento, pero hay señales de que la política restrictiva de la Fed está teniendo un impacto”, resaltó Bloomberg.
Las ventas de viviendas se han desacelerado y la morosidad y gasto de los consumidores se ha moderado. Por su parte, la tasa de desempleo —aunque sigue siendo históricamente baja en 4 %—, ha aumentado en los últimos meses.
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