
El ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, se pronunció sobre el desabastecimiento de medicamentos en varias ciudades de Colombia y señaló que la crisis es estructural y se arrastra desde hace más de 25 años.
Según el funcionario, el sistema de salud ha estado enfocado en tratar enfermedades en lugar de prevenirlas, y la reforma busca cambiar ese enfoque.
Jaramillo advirtió que la acumulación de deudas ha llevado al colapso del sistema: «Todas las EPS tienen deudas con proveedores y clínicas, sumando más de $25 billones «. Para estabilizar la situación, el Gobierno considera fundamental una reforma que inyecte entre $6 y $7 billones en el primer año.
El caso de Audifarma
Jaramillo cuestionó la actuación de Audifarma en la distribución de medicamentos, señalando que entre diciembre y febrero la empresa recibió $280.000 millones, pero suspendió abruptamente sus operaciones, afectando el suministro de fármacos.
“¿Cómo es posible que Audifarma se niegue a entregar los medicamentos que tiene en bodega? ¿Por qué se retira de manera repentina, cierra sus expendios y deja a los pacientes sin acceso a sus tratamientos? Eso no se puede permitir”, enfatizó el ministro.

Jaramillo también criticó que, pese a sus supuestos problemas financieros, la empresa continúe invirtiendo en infraestructura. «Mientras argumentan dificultades económicas, siguen construyendo clínicas en Pereira. Esto es inaceptable», afirmó.
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Monopolios en la distribución de medicamentos
El ministro también cuestionó el papel de los gestores farmacéuticos, creados durante el gobierno de Iván Duque, asegurando que se han convertido en monopolios que afectan la distribución de medicamentos. Como medida temprana afirmó que: «Estamos reorganizando el sistema para garantizar el abastecimiento y evitar que la crisis se agrave», afirmó.

Frente a la posibilidad de intervenir depósitos de medicamentos para evitar el acaparamiento, Jaramillo subrayó que el Gobierno actuará siempre dentro del marco legal. «Cada caso debe analizarse en detalle para determinar cuándo es necesario que intervenga la fuerza pública y cuándo no», puntualizó.
Para el ministro, la única solución viable es avanzar con la reforma a la salud, que pone el foco en la prevención, promoción y atención primaria. «Es una reforma urgente e indispensable para garantizar el derecho a la salud en Colombia», concluyó.