En una entrevista con la Revista Semana, el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, habló sobre la ejecución de la ley de financiamiento y por qué se ha demorado desde su radiación en julio.
“El proyecto de ley de financiamiento fue radicado en julio. Va a cumplir cuatro meses y no le han dado trámite. La reunión era simplemente para mirar la agenda prevista”, señaló Bonilla en la entrevista.
Por su parte, Semana le preguntó a Bonilla: ¿Y la demora es por lo sucedido con el presupuesto, que no se aprobó en el Congreso y que parte de su fondeo depende de este proyecto de ley?
Para responder, el ministro dijo: “El proyecto de ley de financiamiento se radicó antes de que el Congreso tuviera que decidir sobre el monto del presupuesto ($523 billones). Entonces no se trastocó por eso. La normativa permite radicar un proyecto de presupuesto que no está financiado del todo y para eso se presenta un proyecto que complete el financiamiento. Fue lo que hicimos. Es un trámite ordinario. No es la primera vez que pasa en Colombia”.
¿Qué dijo Bonilla sobre la reforma tributaria y Regla Fiscal?
Siguiendo con la entrevista, el medio le dijo a Bonilla que entre los parlamentarios hay voces que dicen que se trata de una reforma tributaria y debería ir en comisiones terceras, no en las que se tramita el presupuesto (terceras y cuartas).
“Está tramitado por las comisiones terceras, pero como es complementario del presupuesto, lo tramitan las comisiones económicas conjuntas. Ha pasado ya en otras circunstancias, que sale aprobado el presupuesto y la ley de financiamiento continúa su discusión. Eso no tiene ninguna objeción”, respondió el ministro de Hacienda.
En cuanto al tema de la Regla Fiscal, Semana le preguntó a Bonilla: sobre lo que se sabe del proyecto, hay reparos a la idea de adelantar la regla fiscal, con lo cual el Gobierno obtendría $5 billones. ¿Aceptaría quitar ese punto?
En su respuesta, Bonilla dijo: “Como en todo proceso aprobatorio, hay opiniones divididas. En este caso, los grupos de oposición son los que dicen que esa alternativa no les gusta. En el resto de los congresistas hay un ambiente favorable. De hecho, cuando se estaba discutiendo el monto en el proyecto de presupuesto, dijeron que iban a aprobar la medida de adelantar la regla fiscal, al igual que el impuesto a las plataformas; y que el resto lo discutiríamos”.
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Además, surgieron preguntas como: ¿Por qué incluyó la medida con la regla fiscal en este proyecto y no como ley aparte? ¿No le parece riesgoso, dado que de ella depende casi la mitad del recaudo esperado con la ley?
Para responder, Bonilla señaló: “Adelantar la regla fiscal encaja en esta ley porque es para completar el financiamiento del presupuesto”.
En cuanto a los tiempos para que el proyecto sea aprobado, Semana le preguntó a Bonilla: Estamos a un mes de terminar las sesiones ordinarias del Congreso, ¿no le parece que los tiempos están apretados?
A ello, Bonilla respondió: “Los tiempos alcanzan si el Congreso tiene la voluntad política de discutirlo. Lleva cuatro meses radicado y no lo han tramitado”.
De igual manera, en cuanto a si el presidente convocará a sesiones extras de ser necesario, el ministro de Hacienda respondió que lo más seguro es que sí.
Y, además, Semana le preguntó: ¿Cree que logrará los $12 billones previstos originalmente en el proyecto?
En lo que Bonilla respondió: “Esa es la meta global. Lo que les he escuchado a los congresistas es que aprobarían, sin pensarlo dos veces, medidas que podrían aportar $8 billones. Quedarían para discusión $4 billones. Pero, además, ellos mismos están interesados en incluir otros artículos. Cuando se discutió el presupuesto, no aceptaban el monto, pero luego presentaron proposiciones que valían $70 billones más. Se muestran en desacuerdo con una ley de financiamiento por $12 billones, pero pretenden propuestas que requieren más gasto”.
Finalmente, para responder a la pregunta de si se confía que va a pasar esta ley de financiamiento teniendo en cuenta la coyuntura, Ricardo Bonilla dijo: “Estoy confiado en que se tramite y que no haya posiciones ambivalentes; es decir, que desde el Congreso le digan al público una cosa y en lo privado otra”.
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