La Asociación Colombiana de Ingenieros de Petróleos, Energía y Tecnologías Afines (Acipet) dio a conocer que el anuncio sobre la importación de 40 GBTU/día de gas en Colombia, representa un 4 % de la demanda interna y prende alarmas para el país.
Según la asociación, la decisión “evidencia la perdida de autosuficiencia del país en materia de gas” y es reflejo de la estrechez entre oferta y demanda y marca el inicio del consumo de gas importado en hogares, industrias y vehículos durante los próximos años.
“Todas las empresas, agentes del mercado y entidades de gobierno involucradas con el gas Natural, tienen contemplada la importación de gas, para estos usuarios a partir de 2025 y que esta condición se mantendrá hasta que ingrese el gas del offshore y/o se materialicen proyectos en tierra, con volúmenes significativos, que puedan cubrir el faltante”, dijo la organización sobre la situación del gas en Colombia.
Según Acipet, esto también implica que los precios del gas en Colombia van a tender a crecer de acuerdo con los precios internacionales, los volúmenes finalmente importados y los costos de transporte del GNL.
“Las reservas y producción de gas han venido declinando desde hace diez años y no hemos logrado contrarrestar esta tendencia a partir de nuevos descubrimientos, optimizaciones en producción y/o mediante el desarrollo y puesta en producción de descubrimientos recientes, muchos de los cuales tiene pendiente superar contingencias de índole legal, ambiental, social, de orden público o económico”, dice la asociación en un comunicado.
Más llamados de atención para el gas en Colombia
Aseguran, además, que la prohibición de fracking en el país impide validar y cuantificar el potencial, las afectaciones y magnitudes en términos ambientales, sociales, hídricos y de salud de las personas, “lo cual nos permitiría como país tomar las mejores decisiones respecto a la explotación de estos yacimientos”.
Sobre este escenario, Acipet asegura que, para poder superar la situación compleja para el gas en Colombia, se debería retomar la discusión desde lo técnico, reglamentación vigente “y con la altura y compromiso que exige el país, sobre la realización de los proyectos piloto de investigación en yacimientos no convencionales”.
Además, “la exploración debe ser una prioridad a partir de los activos actuales o si es necesario, evaluar la apertura de nuevas áreas. Si no se realizan exploraciones hoy, enfrentaremos una caída significativa en los volúmenes de reservas y producción dentro de 7 años”.
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Al tiempo que se concluyen diciendo que esto debe incluir la búsqueda no solo de gas en Colombia, sino de petróleo, “el cual genera a través de regalías, impuestos, ingresos, dividendos y exportaciones, los recursos necesarios que necesita la economía del país”.
