Estados Unidos planea retrasar un menú de aranceles chinos adicionales programados para comenzar el primero de marzo, anunció el domingo el presidente Donald Trump, ya que las dos economías más grandes del mundo tienen un final definitivo para una amplia disputa comercial.
En una serie de publicaciones en Twitter, Trump citó un «progreso sustancial» en las conversaciones bilaterales entre los Estados Unidos y China.
Como resultado, el presidente dijo que suspendería los nuevos impuestos que habrían tenido lugar el viernes, pero no expresó un nuevo plazo.
La semana pasada, fuentes familiarizadas con la situación dijeron a Cnbc que Estados Unidos y China están discutiendo una reunión a fines de marzo entre Trump y el presidente chino Xi Jinping en Florida, noticias que Trump confirmó el domingo.
La cumbre está programada para llevarse a cabo en el club de golf Mar-a-Lago de Trump en Palm Beach, Florida.
Antes de esa confabulación, China se comprometió a comprar hasta $ 1.2 billones en productos estadounidenses, aunque hasta la semana pasada, se dijo que las dos partes estaban muy alejadas en cuestiones relacionadas con la transferencia forzosa de propiedad intelectual.
Hablando en la Casa Blanca horas después de sus tweets, Trump dijo que podría haber «noticias muy importantes en la próxima semana o dos» si las negociaciones comerciales salen bien.
«China ha sido excelente. Queremos llegar a un acuerdo que sea bueno para ambos países y eso es realmente lo que vamos a hacer», dijo el presidente a los gobernadores de EE. UU. en el evento.
El sentimiento del mercado de Asia fue ampliamente más alto el lunes.
La guerra comercial entre Estados Unidos y China ha afectado a los mercados y ha ensombrecido las perspectivas de crecimiento mundial. En sesiones comerciales recientes, los inversores han estado evaluando lentamente la posibilidad de que la pelea se resuelva. El domingo, los futuros de Dow indicaron una apertura modestamente más alta el lunes en Wall Street.
