Un fuerte terremoto de magnitud 7,7 sacudió el sudeste asiático el 28 de marzo de 2025, afectando gravemente a Myanmar y Tailandia. El epicentro se localizó cerca de Mandalay, la segunda ciudad más grande de Myanmar, con una población de 1,2 millones de habitantes.
El sismo ocurrió a las 12:50 hora local (6:20 GMT) a una profundidad de 10 kilómetros, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
En Myanmar, el terremoto causó el colapso de varios edificios de cinco pisos en Mandalay, dejando calles cubiertas de escombros y escenas de pánico entre los residentes.
Al menos tres personas murieron en la ciudad de Taungoo en Myanmar cuando una mezquita se derrumbó parcialmente, dijeron testigos, mientras que los medios locales informaron que al menos dos personas murieron y 20 resultaron heridas después de que un hotel se derrumbara en Aung Ban.
De acuerdo con información de Reuters, el gobernador de Bangkok, Chadchart Sittipunt, informó que hubo tres muertos por el terremoto. Advirtió sobre posibles réplicas, pero instó a la población a mantener la calma y afirmó que la situación estaba prácticamente bajo control.
De igual manera, ante la magnitud de los daños, la junta militar de Myanmar declaró el estado de emergencia en seis regiones, incluyendo Mandalay y la capital, Naipyidó, para facilitar las operaciones de rescate y asistencia humanitaria.
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«Todos salimos corriendo de casa cuando todo empezó a temblar», dijo a Reuters un residente de Mandalay. «Presencié el derrumbe de un edificio de cinco plantas ante mis ojos. En mi pueblo, todos estaban en la calle y nadie se atrevía a volver a entrar en los edificios».
Así fue la magnitud del terremoto en Tailandia
En Tailandia, el terremoto se sintió con fuerza en Bangkok, situada a 1.000 kilómetros al sur del epicentro. Un rascacielos en construcción colapsó en la capital tailandesa, atrapando a al menos 43 trabajadores bajo los escombros y causando escenas de pánico en las calles. La Bolsa de Valores de Tailandia suspendió temporalmente sus actividades comerciales como medida de precaución.
Publicaciones en redes sociales mostraron edificios derrumbados y escombros esparcidos por las calles de la ciudad.
El impacto del sismo también se extendió a la provincia china de Yunnan, donde se reportaron daños materiales y heridos, aunque no se han confirmado víctimas mortales hasta el momento.
Los medios locales informaron que un hotel en Aung Ban, en el estado de Shan, quedó reducido a escombros, y un medio, la Voz Democrática de Birmania, informó que dos personas habían muerto y 20 estaban atrapadas.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) informó que el sismo, que se produjo al mediodía, tuvo una magnitud de 7,7 y se localizó a una profundidad de 10 km (6,2 millas). El epicentro se ubicó a unos 17,2 km de la ciudad birmana de Mandalay, con una población de aproximadamente 1,5 millones de habitantes.
Las autoridades y equipos de rescate continúan evaluando la magnitud total de los daños y coordinando las labores de asistencia en las áreas afectadas. Se espera que el número de víctimas y daños materiales aumente a medida que avancen las operaciones de rescate y se recopile más información.
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