El Fondo Monetario Internacional (FMI) entregó un análisis sobre las decisiones que ha liderado el Gobierno Nacional en el marco de la ejecución de políticas públicas económicas para atender los efectos de la pandemia del coronavirus.
Para el FMI es importante tener en cuenta lo que se hará en términos de ajustes fiscales. Dice el organismo que una consolidación gradual guiada por reformas fiscales debería asegurar “el retorno al ancla durante los próximos cincos años”.
Sin embargo, llama la atención en el hecho de que volver a la Regla Fiscal durante 2022 (suspendida en 2020 y 2021) “resultaría un fuerte ajuste fiscal que podría descarrilar la recuperación”.
Hamid Faruquee, jefe de la demisión del FMI en Colombia, pidió que entonces exista un marco de consolidación y por ende un espacio más amplio para que la Regla Fiscal en Colombia retorne.
Espera entonces el FMI que en 2021 debería aprobarse un plan de consolidación fiscal que se considere más gradual, vital para la sostenibilidad de las fianzas públicas, pero también para mandar un mensaje de credibilidad al mercado internacional.
El objetivo que debería seguir el Gobierno de Colombia en ese sentido se centra en que sí se debe restablecer la meta del déficit de manera estructural y reprogramar el horizonte, pero bajo la ruta del Marco Fiscal de Mediano Plazo.
Dicho plan, según el FMI, debería contener los siguientes elementos.
- Aumento aduanero de los ingresos.
- Reducir el endeudamiento público salvarguardando la inversión pública.
- Incrementar, de manera gradual y duradera, el recaudo tributario en cerca de dos puntos porcentuales del PIB.
“En términos de su composición, deben considerarse medidas de recaudación que favorezcan el crecimiento económico, y que estén enfocadas en la eficiencia fiscal, la progresividad, la sostenibilidad y la equidad”, dice el FMI.
Lo anterior incluye la ampliación de la base del impuesto a la renta de personas naturales “y la reducción de las exenciones al IVA con mecanismos de compensación para proteger a los hogares más pobres, así como la eliminación de regímenes preferenciales para las empresas”.
Por lo demás, el FMI espera que la reactivación de Colombia se centre también en la oportunidad de hacer un seguimiento juicioso del Marco Fiscal de Mediano Plazo y en contar con una política monetaria expansiva.
“Dada la credibilidad del Banco de la República y el espacio de política monetaria disponible, debe de considerarse una postura más expansiva si la inflación permanece significativamente por debajo de la meta, o en caso de materializarse riesgos a la baja para el crecimiento”, añadió el FMI.
El organismo multilateral se suma a la recomendación que vienen haciendo calificadoras, tanques de pensamiento y otros organismos multilaterales en el sentido de que “las autoridades deben continuar monitoreando cuidadosamente los riesgos en relación a la estabilidad financiera y asegurar suficientes provisiones para cubrir pérdidas crediticias”.
Asobancaria y Anif, las dos asociaciones que reúnen a los bancos más importantes del país, ya han dicho que hay las suficientes provisiones para soportar un inevitable crecimiento de la cartera vencida en Colombia.
“Las reformas estructurales y la integración de migrantes pueden apoyar la recuperación y sentarían las bases para un crecimiento inclusivo y sostenible. La reducción de las barreras a la formalización empresarial y laboral reduciría aún más el desempleo durante la fase de recuperación y mejoraría la productividad”, concluye el FMI.
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