El Fondo Monetario Internacional (FMI) elevó la proyección de crecimiento de la economía colombiana para este año desde el 1,1 % publicado en abril hasta el 1,6 %, es decir, 50 puntos básicos superior.
Si bien la cifra es inferior a la estimada para Latinoamérica y el Caribe en 2024 (2,2 %), es superior a la de países como Ecuador (0,3 %) y México (1,5 %). En la región, los mejores resultados los tendrían Paraguay (3,8 %), Uruguay (3,2 %) y Brasil (3 %).
Además, el organismo reafirmó que la economía colombiana crecerá el 2,5 % en 2025. Esta proyección se alinea con la de los analistas económicos consultados por el Banco de la República, que prevén una tasa de entre el 2 % y el 3 % para el próximo año.
En su más reciente informe de perspectivas de la economía mundial, el FMI ratifica que el crecimiento global se mantendrá estable, pero con tasas decepcionantes. En cinco años, la tasa debería situarse en 3,1 %, “un nivel mediocre si se lo compara con la media previa a la pandemia”.
Para algunos países, como Colombia o Estados Unidos, se han hecho revisiones al alza en el pronóstico de crecimiento económico; sin embargo, también hubo revisiones notables a la baja en otras economías avanzadas, en particular los de los países europeos más grandes.
Según el FMI, los persistentes factores adversos de índole estructural, como el envejecimiento de la población y la escasa productividad, están frenando el crecimiento potencial en muchas economías.
También alertó sobre la elevada incertidumbre en torno a las políticas: “brotes repentinos de volatilidad en los mercados financieros, como el que se produjo a principios de agosto, podrían endurecer las condiciones financieras y lastrar la inversión y el crecimiento, especialmente en economías en desarrollo”.
Desinflación mundial continúa y Colombia no es ajena
El FMI subrayó también que el proceso de desinflación mundial continúa, aunque “todavía es posible que aparezcan baches en el camino hacia la estabilidad de precios”. En Colombia, la proyección es que la inflación llegue al 6,7% en 2024 y al 4,5% en 2025.
La cifra estimada por el organismo internacional es superior en 1,2 puntos porcentuales a la meta del Gobierno nacional, que estimó recientemente una variación del IPC de 2,5 % para todo 2024. Según el DANE, en lo corrido del año hasta septiembre, la inflación se ubica en 4,58 %.
Se prevé que la inflación general mundial disminuya de un promedio anual del 6,7 % en 2023 al 5,8 % en 2024 y al 4,3 % en 2025. Las economías avanzadas alcanzarían sus metas antes que las economías emergentes y en desarrollo.
El informe de perspectivas de la economía mundial sugiere a los países calibrar cuidadosamente las prioridades de política económica a corto plazo para garantizar un aterrizaje suave mientras disminuyen los desequilibrios cíclicos. Pero no descarta que se lleven a cabo reformas estructurales para elevar las perspectivas de crecimiento a mediano plazo y para mantener el apoyo a los más vulnerables.
Aun así, el FMI advirtió que los precios de los bienes se han estabilizado, pero la inflación de los servicios se mantiene elevada en muchas regiones, “lo cual destaca la importancia de entender las dinámicas sectoriales y de calibrar la política monetaria de manera consecuente”.
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