Fitch Ratings bajó las calificaciones nacionales de Construcciones El Cóndor y mantuvo la perspectiva en negativa.
La calificación nacional de largo plazo de la compañía fue reducida de AA hasta A, la calificación nacional de corto plazo bajó desde F1 hasta F2, al igual que la valoración de papeles comerciales.
Según Fitch Ratings, la baja de las calificaciones incorpora el debilitamiento del perfil financiero de la compañía, su posición debilitada de liquidez y apalancamiento aún elevado.
“Las necesidades de capital de trabajo mayores a las anticipadas se han financiado con un aumento de la deuda a corto plazo, lo que ha impactado la capacidad de la empresa para generar un flujo de efectivo libre positivo y redujo su ritmo de desapalancamiento”, explicó la calificadora.
Al respecto, El Cóndor se pronunció y dijo ha venido desarrollando su estrategia de financiación en el mercado de capitales soportada en las calificaciones de Fitch Ratings.
Dijo que tiene el “compromiso de desapalancar a la compañía basado en la liberación de caja atrapada en el capital invertido en la concesión Cesar-Guajira y en la concesión Vías de las Américas, entre otros”.
La concesión Vías de Las Américas tiene un valor de $1,15 billones e inició labores el 31 de mayo de 2011. El proyecto atraviesa Urabá, Montería, San Marcos, San Pablo y Mompox.
Por su parte, la concesión Cesar-Guajira tenía una inversión de $387.637 millones que se destinan en la operación, mantenimiento, rehabilitación y construcción de 350,3 km de vía que inician en San Roque (Cesar) y finalizan en Cuestecitas (La Guajira).
En días pasados, directivos de El Cóndor dijeron al respecto que: «la caja atrapada que nosotros tenemos en Cesar-Guajira se ha venido liberando, nosotros hicimos la liquidación bilateral en diciembre y recibimos los primeros $70.000 millones con relación a esa liquidación. Dejamos un valor por recibir que para la ANI tenía que estár sujeto a una preconciliación antes del Tribunal de Arbitramento de $15.000 millones que está por salir en estos días, porque ya a la ANI le autorizaron los TES».
Y añadió: «Nos quedan entonces actualizados unos $115.000 millones que si se tienen que dar con el cierre del Tribunal de Arbitramento que ya empezó su curso y que tiene un plazo de seis meses (…) Esto ha implicado por supuesto un esfuerzo de liquidez importante para la compañía, porque si hacen la suma estamos hablando de más de $180.000 millones que estaban atrapados para la compañía ahí, los venimos recuperando desde diciembre, pero sigue habiendo un valor muy importante atrapado y por eso es que tenemos ese esfuerzo importante ahí en endeudamiento».
Y aseguró que «realmente lo que va a pasar, es que cuando se libere esta liquidez, nuestro endeudamiento va a bajar en una manera importante, sumado a otros eventos de desatrapamiento de caja que tenemos planeados para el resto del año».
La constructora añadió que cuenta con un backlog de $1,7 billones que le brinda visibilidad a la generación de ingresos y flujo de caja para los próximos 1,8 años.
“Los accionistas a través de las decisiones de la Asamblea General, han ratificado el compromiso de tener una política permanente de reinversión de utilidades y una conservadora distribución de dividendos, para generar liquidez y solidez a la compañía, apalancando su crecimiento”, finalizó El Cóndor.
—