El presidente de la Asociación Colombiana de Distribuidores de Energía Eléctrica (Asocodis), José Camilo Manzur, en entrevista con Valora Analitik, habló sobre la situación por la que atraviesa la industria de los servicios públicos con la falta de recursos para los subsidios de energía en Colombia.
Lo más relevante:
Pese a las constantes alertas de los gremios del sector energético del país, el Gobierno Nacional insiste en que se ha cumplido con esta obligación. De hecho, en la reciente respuesta del Ministerio de Minas y Energía a los gremios se destacó: “hemos cumplido como cartera con nuestras responsabilidades frente a los subsidios para estratos 1, 2 y 3, emitiendo las resoluciones correspondientes para que el Ministerio de Hacienda y Crédito Público gire los recursos”.
Además, la cartera minero-energética precisó que “a la fecha se han pagado $2,91 billones en subsidios de energía y $485.000 millones en subsidios de gas para los estratos señalados”.
Entre tanto, Manzur explicó cómo está la situación y qué es lo que más preocupa a la industria:
Los subsidios de energía en Colombia son unos recursos que alivian la factura a los estratos más bajos y que deben ser cubiertos por el Gobierno Nacional, en ese orden de idea, ¿cómo está la situación con estos subsidios?
Vale la pena repetir que hoy nosotros (las empresas distribuidoras y comercializadoras de energía eléctrica) tenemos un problema gravísimo desde el punto de vista financiero: que se puede convertir en un problema que conlleve a dificultades físicas.
A septiembre 30 de 2024, la suma que tenemos por cobrar es cerca de $7 billones.
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¿A qué corresponden esos $7 billones?
$2,1 billones de subsidios ya suministrados a los estratos 1, 2 y 3.
$4 billones de opción tarifaria y cerca de $900.000 millones en deudas de usuarios oficiales y constitucionalmente protegidos.
Como yo lo he expresado en múltiples ocasiones, esos $7 billones representan dos años de ingreso bruto a los comercializadores de energía. Ningún sector económico puede ser viable cuando tiene sumas por cobrar que sean el doble de los ingresos brutos. Por ello hemos hecho un llamado y lanzado una alerta respetuosa al Gobierno Nacional para que pongan al día con los subsidios.
Para que, a su vez, se cumpla la promesa que hizo el señor presidente el 7 de mayo, hace cinco meses de que la Nación va a asumir la deuda de los saldos de la opción tarifaria.
Y, por supuesto, que necesitamos un apoyo y un acompañamiento de la Procuraduría General de la Nación para que ayude porque estos usuarios oficiales tienen la obligación legal de apropiar en sus presupuestos los rubros de servicios públicos.
Entonces, son $7 billones que necesitamos que se paguen. ¿Por qué? Porque no nosotros vemos en una disyuntiva: no tengo todos los recursos para adelantar todas las actividades, nosotros siempre hemos financiado los subsidios y queremos seguir haciéndolo, pero en esta situación de liquidez es difícil.
¿Las electrificadoras están, entonces, en una encrucijada por los subsidios de energía en Colombia?
Estoy en la disyuntiva: ¿Pago el mercado mayorista, los compromisos de generación y demás? Pero si pago todo me voy a quedar sin recursos para financiar los subsidios.
Y si no se financian los subsidios de energía ¿qué puede ocurrir?
Un impacto en la factura de energía, más no en la tarifa. Y estos pueden ser cercanos al 150 % en el estrato 1. ¿Por qué? Porque a un usuario que le llega una factura de $100.000 en el estrato 1, hoy está pagando $40.000.
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¿Por qué? Porque por ley tienen un subsidio del 60 %; o sea, está recibiendo $60.000 de subsidio. En cambio, si no hay estos recursos va a pasar de $40.000 a $100.000, y eso es lo que representa un incremento del 150 %.
Ahora bien, si doy los subsidios, no voy a tener recursos para pagarle a los generadores. Y hoy -que estamos en una situación estrecha donde los generadores térmicos están full- si los comercializadores no pagan a la generación, ellos, a su vez, no van a poderle pagar a quienes les suministren los combustibles (gas, carbón, etcétera).
Por eso decimos que esas dificultades financieras pueden llevar a unas dificultades físicas: lo que hemos dicho que un apagón financiero puede llevar a uno físico, específicamente, en las empresas pequeñas.
¿Y es probable que el panorama se torne más complicado?
Esta situación puede empeorar aún mucho más. Porque con las baja lluvias los térmicos en la base, y los precios en la bolsa elevados. Lo que implica que nosotros como comercializadores tengamos una mayor exigencia, una mayor necesidad de caja para poder comprar energía. Esos $7 billones en subsidios de energía se van a incrementar, por eso decimos, el tema es bien difícil.
Incluso, pudiera haber más preocupaciones porque el Ministerio expidió una norma -que debería expedir la CREG– en la que se expresa que aquellas empresas intervenidas no se les aplique la limitación de suministro.
En pocas palabras, ¿qué significa eso?
Que una empresa intervenida, así no pague, le tengan la obligación de suministrar energía y eso es un tema que puede generar un efecto perverso.
Y, si no hay recursos para las empresas pequeñas, muchas van a verse obligadas a levantar la mano para que el Estado llegue y tomé de ellas para poder cumplirle a la ciudadanía y que no haya cortes del servicio.
Es una situación bastante crítica y sumado a algo más crítico: que si hoy no somos viables como comercializadores -por el tema de los $7 billones-, con la norma que sacó la CREG para comentarios con la que se disminuye el promedio, los recursos e ingresos de los comercializadores se disminuyen en un 45 %.
O sea que, si hoy no somos viables, con esta disminución va a ser casi que: apague y vámonos.
¿El Gobierno Nacional ha acertado en algo?
Vale la pena reconocer el esfuerzo que ha hecho el Gobierno con algunos temas: la resolución de la opción tarifaria y el de Findeter, pero eso no es suficiente.
El Ministerio de Minas y Energía aseguró que se han hecho pagos de $2,91 billones en subsidios de energía, ¿esa cifra ha aliviado en algo?
El Ministerio sacó un comunicado donde dice que ha girado recursos por $2,91 billones, eso es cierto, pero esa cifra no elimina la deuda de los $2,1 billones. O sea, esos $2,91 billones, suponemos nosotros, que corresponden a giros que han hecho este año de montos que se adeudaban del año anterior: hubo un pago parcial, porque aún deben una parte de 2023.
También abonos parciales de 2024 -que creemos son hasta junio-, algunos subsidios de energía que han dado a las zonas no interconectadas y a otros tipos de subsidios.
Es cierto que han podido pagar los $2,9 billones, pero también es cierto que la información nuestra de $2,1 billones es válida.
¿Cuál podría ser ese cuello de botella?
El Ministerio manifestó que se han hecho unas liquidaciones y las pasa a Hacienda y la cartera de Hacienda debe pagarlas. Pero lo que pasa es que el Ministerio de Hacienda no ha pagado todas las resoluciones que ha expedido el MinMinas: no se han pagado todas las que se han liquidado.
Ahí hay un llamado a que el Ministerio de Hacienda se ponga al día y, a su vez, tanto a Minas como a Hacienda, para que revisen los procedimientos y los trámites para reducir los tiempos y que, evidentemente, los dineros fluyan con mayor rapidez a todas las empresas.
¿Por qué se acumulan esos $7 billones que dice se hacen falta a las electrificadoras?, ¿cuál es la mecánica para que eso pase?
Recordemos, uno es la opción tarifaria -que es la suma más gruesa $4 billones-. Eso se vino desde la pandemia porque fueron sumas que no se pudieron cobrar en su momento y que ya se están cobrando de manera diferida, algunos hasta a diez años. Los $2,1 billones son subsidios del Gobierno Nacional.
Ahora, si se cogen los $2,1 billones de subsidios de energía y de esos $4 billones hay cerca de $1 billón de subsidios, estamos hablando que sería 2,1 más uno nos da 3,1, más de $900.000 millones de la deuda oficial, da como resultado $4 billones de $7 billones.
O sea, casi un 60 % de los $7 billones con por el tema de recursos del Estado, porque las deudas oficiales son de los entes territoriales.
También, el presidente se comprometió, reiteró, a que en la Nación asumía esos recursos, estamos esperando que eso se dé y se materialice rápidamente para beneficio de los usuarios. Porque, cada día que pasa, sin que se reconozcan esos recursos, va en contra de los mismos usuarios.
*Esta entrevista se hizo en el marco del Congreso de Asoenergía 2024