La compañía chilena de grandes almacenes, Falabella, anunció que, debido a la coyuntura mundial por el coronavirus, postergará algunas de sus inversiones en tiendas físicas, donde opera en Chile, Argentina, Perú, Colombia, Brasil, México y Uruguay. A su vez, reorientará los recursos en su estrategia online, esperando mitigar, en parte, el impacto de la crisis que afronta en general el sector retail en el mundo.
Por eso retrasará inversiones y la apertura de las primeras tiendas Ikea en Chile, previstas originalmente para este año, como parte de su plan de inversiones de US$2.900 millones entre 2020 y 2023, el 30% destinado a la renovación de su parque de tiendas, mejoras en malls y reparación de tiendas dañadas en Chile por las protestas sociales a final del año pasado.
A principios de año, el grupo anunció inversiones por este monto, de los cuales el 38% (US$ 1.085 millones) se destinará a logística y tecnología para crecer en el comercio digital.
Para enfrentar el nuevo escenario, Falabella ya tomó una decisión: postergó las inversiones en el segmento inmobiliario pues, específicamente, se pararon las remodelaciones de tiendas y centros comerciales. Para la compañía son desembolsos no esenciales en este momento.
Por el contrario, se mantienen los proyectos de digitalización, a un ritmo creciente. Mientras en 2015, el 26% de las inversiones era para tecnología y logística, en 2020 el plan considera el 38% del total y posiblemente incremente, dada la postergación de las remodelaciones.
Falabella ha desplomado su cotización en bolsa desde que la pandemia llegó a Chile. Las acciones de la empresa cayeron el 23 de marzo hasta 1.530 pesos chilenos (US$1,8), lejos de la cotización de 6.300 pesos chilenos (US$7) de la misma jornada de 2019. Desde inicios de año, la compañía ha contraído su cotización un 34,8%.
(Con información de Diario Financiero)
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