Con una millonaria inversión en Colombia y América Latina, Emergent Cold buscará convertirse en la empresa líder de logística de cadena de frío para alimentos en la región.
Así lo dijo Alain Eichmann, director general para la región Caribe en Emergent Cold Latam, en entrevista con Valora Analitik.
Eichmann dirige la empresa en Colombia, Panamá, República Dominicana y Guatemala. Pero no son los únicos países en los que está la compañía. También tiene presencia en México, Brasil, Chile, Ecuador, Paraguay, Perú y Uruguay, llegando a 11 en total. Y analiza la posibilidad de operar en Costa Rica y Puerto Rico.
Esa amplia presencia en buena parte del continente, explicó el ejecutivo, responde a que “nos dimos cuenta de que no había suficiente proveedores de infraestructura de frío para alimentos en casi toda América Latina”. Y, por el otro lado, que no se configuraban como una red, sino que cada uno de estos proveedores tenía un foco en un país.
“Entonces vimos una oportunidad de negocio”, contó. Ahora, el propósito es consolidar su presencia con una inversión que, en los últimos años, ha sido US$1.200 millones. En Colombia ya se invirtieron US$100 millones.
En 2024, la compañía invertirá en América Latina US$500 millones. Y en los próximos años, destinarán otros US$100 millones para el país.
Así busca crecer Emergent Cold en Colombia
En 2022, Emergent Cold adquirió Frigorífico Metropolitano, que tiene un impacto en regiones como Bogotá, Cartagena y Buga. Y ahora, en 2024, adquirió Red Polar, una transacción que ubica a la empresa como la de mayor presencia en Bogotá y su región.
Estas dos compras permitieron que Emergent Cold llegara a tener 28.000 palets (las plataformas en las que se ubican los productos).
Pero, además de Bogotá, la compañía tiene una importante presencia en el resto del país. Está, de manera específica, en Bucaramanga y Cúcuta, desde donde se cubre el occidente del país. En el Pacífico está en el Eje Cafetero y el Norte del Valle. Y en el Caribe colombiano, desde Cartagena. Pero, además, tiene planes de expansión a otras ciudades como Medellín y Barranquilla.
Desde estas regiones participa en la exportación e importación de distintos alimentos congelados. En la primera, por ejemplo, participa en el envío de chocorramos congelados a otros países. También, se habilitó la bodega en Cartagena para exportar carne a China.
De acuerdo con Eichmann, esa estrategia es con la que la empresa ha buscado posicionarse en la región como un actor clave para la cadena de logística de alimentos. Precisamente, en los últimos años, la empresa ha comprado otras 19 en distintos países, llegando a 75 bodegas. Además, ha construido cinco bodegas adicionales y tiene planes de construir más.
Una apuesta por la sostenibilidad y la eficiencia
Otro punto clave en la estrategia de crecimiento de Emergent Cold es la sostenibilidad y la eficiencia.
Eichmann señaló que para una empresa productora de alimentos no resulta eficiente tener una bodega de refrigeración o congelación, dado que esta no se usa siempre al 100 % de su capacidad, pero sus costos sí se mantienen, “y el costo más alto es el de la energía”.
“Muchas compañías, sobre todo en épocas de crisis, de falta de liquidez y de Capex para invertir en logística, se enfoca en, por ejemplo, la apertura de nuevos puntos de venta o de maquinaria”, señaló. Y agregó que, entonces, “construir la propia infraestructura no es siempre lo más eficiente”.
En ese panorama es que entra a operar Emergent Cold, que, además, en Colombia, llegó en diciembre de 2023, al “100 % de bodegas con paneles solares para reducir el consumo de energía que tenemos en la red de energía nacional”.
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De esa forma, la eficiencia y la sostenibilidad van por el mismo camino. Y en ese contexto, surgen estrategias como el de tener puertas rápidas, en vez de mecánicas, para evitar “que el frío se escape de las bodegas”. Esto, a su vez, lleva a una reducción en los costos.
Sobre el futuro de la compañía, por estos factores, Eichmann se mostró optimista en que podrá seguir creciendo, incluso en medio de la inestabilidad política y económica de la región.
“Nuestro negocio no se afecta tanto por eventuales problemas económicos y políticos. Dentro de los países, las personas continúan consumiendo alimentos congelados. Además, como la población crece, este tipo de negocios tiene una tendencia a crecer”, apuntó.
