En conversación con Valora Analitik, Jorge Bedoya, presidente de la Sociedad de Agricultores de Colombia (SAC), se refirió a cómo ven desde su segmento la propuesta de reforma tributaria que entregó el ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo.
Se refirió Bedoya a las bondades de la iniciativa, pero también a las carencias y las posibles propuestas que pudieran llegar en el marco del debate del proyecto en el Congreso de la República
Pistas de la reforma tributaria
Empezó por mencionar Bedoya que esta reforma tributaria desde el sector agropecuario es positiva pues no se meten con la comida de la canasta básica y nutricional de los colombianos, haciendo la salvedad de que hay un tema de los ultraprocesados y habrá que determinar el impacto para las personas que los consumen.
Adicionalmente, desde los agropecuarios colombianos ven que el tema de la progresividad es clave en el sentido de que quienes tienen más, más aporten. Pero lo más relevante de momento es cómo se va a invertir el recurso en gasto social.
Habrá que ver su sostenibilidad, transparencia y qué de ese dinero irá a la dotación de bienes públicos al sector rural, que es una promesa de este gobierno.
«Era una reforma necesaria para los objetivos de subsidios del gobierno del presidente Petro, pero lo más relevante es que esta reforma no asfixie sino que motive a la inversión y la generación del empleo en el país», dijo Bedoya.
Sobre las disposiciones a las empresas, Bedoya agregó que habrá que ver un análisis de caso por caso. De momento en el sector agropecuario se elimina el incentivo de renta para las mega inversiones.
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“Habrá que ver si con el compromiso de este Gobierno de dinamizar al campo colombiano esa es una medida que resulta favorable o desfavorable. El corazón para el sector rural es la defensa de los intereses de los consumidores de alimentos del país, ahí viene la buena decisión del gobierno de no gravar la canasta básica de los colombianos, complementó Bedoya.
De cara a la meta que tiene el gobierno de Petro de que Colombia sea autosuficiente en la producción de alimentos, y qué papel juega esta reforma tributaria en ese sentido, Bedoya dijo que la iniciativa no aporta en nada pues mantiene condiciones.
“Segundo, la autosuficiencia no depende de las condiciones tributarias, de lo que depende es de cuáles son las condiciones para la producción rentable de alimentos sin desconocer realidades del mercado: hoy hay que importar una gran cantidad de insumos y de fertilizantes”, agregó Bedoya.
Fue enfático Bedoya en advertir que el gasto social que incluye la reforma tributaria debería contribuir a reducir los problemas de hambre.
Ahora, sobre la posibilidad de que en el marco de la discusión de la tributaria se plantee la iniciativa de aumentar aranceles a algunas importaciones, u otras medidas en ese sentido, para apoyar al campo colombiano, Bedoya dejó en claro que la única consecuencia que traería el imponer aranceles sería la de ver un aumento de la inflación.
“Si el gobierno nacional quiere producir más alimentos lo que se requiere es mejorar condiciones: apoyo productivo, mejoramiento de las tierras, de las vías terciarias, los distritos de riesgo, ahí está el verdadero cambio”, aseguró Bedoya.
Otros puntos: inflación en alimentos
Sobre el nuevo repunte en la inflación de los alimentos de julio, el presidente de la SAC aseguró que vuelve a preocupar ese fenómeno toda vez que mantiene en total alerta al segmento.
“La producción de comida en Colombia es de ciclos. Los cultivos de ciclo corto son de seis meses. La cría y engorde puede durar entre seis y ocho meses. Eso implica que estamos muy expuestos”, complementó Bedoya.
Esa exposición es tanto al contexto externo como al local, en este último el alza de las tasas de interés representa un mayor costo por el crédito y para la inversión de la generación de alimentos.
“Por eso le hemos recomendado a la ministra Cecilia López (de Agricultura) que fortalezcan en el presupuesto del año entrante el subsidio a la tasa de interés para que los pequeños productores compensen el mayor costo por las decisiones del Banco de la República”, añadió Bedoya.
Finalmente, sobre la posibilidad que ha mencionado el gobierno del presidente Petro de llevar a cabo una renegociación del TLC con Estados Unidos, Bedoya advirtió que lo que hay es que aprovechar las condiciones que ofrecen los TLC para diversificar la oferta exportadora.
“Renegociar una acuerdo comercial es como una pelea de tigre con burro amarrado y habría que ver quién es el tigre y quién es el burro amarrado. Nos preocuparía que a la hora de buscar una renegociación se encarezca la producción de alimentos en el país y de la misma manera se limiten las exportaciones de productos agropecuarios que generan bastantes empleos”, concluyó Bedoya.
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