Luego de un julio de fuerte volatilidad, el dólar en Colombia sigue la tendencia de depreciación y, después de estar cerca de los $4.700, ahora se cotiza en la barrera de los $4.230. Esto marcará la hoja de ruta en agosto.
Entorno internacional
Desde el lado externo son varias las condicionales que se tendrán en cuenta para el comportamiento del dólar. Tal vez la más importante: cómo reciba el mercado la recesión técnica en Estados Unidos.
Si bien la incertidumbre es grande por el riesgo de estanflación (aumento de la inflación sin crecimiento económico) algunos analistas hacen un llamado a la calma.
La principal preocupación de la recesión técnica es la de pérdida de productividad y lo que pueda representar eso para el mercado laboral.
Leonardo Villar, gerente del Banco de la República, dijo que algunos efectos de esa caída económica podrían verse en 2023 y con una tasa de desempleo creciendo, levemente, al 4 %, sigue siendo este escenario no crítico para la economía de Estados Unidos y para la economía mundial.
Pero también, en el curso de lo que sería el dólar en Colombia para agosto, es clave entender lo que pase con el comportamiento de la inflación. Desde ese frente, en cambio, las expectativas siguen siendo pesimistas.
Aunque Ucrania ha reanudado la exportación de una porción de los alimentos que suministra, el remanente sigue siendo insuficiente para amortiguar el repunte de los precios de los alimentos.
Lo anterior sumado a que los precios de los energéticos van a seguir creciendo en el futuro más inmediato.
Todo este escenario vuelve a poner como determinante el movimiento de las tasas de interés a manos de los bancos centrales. Y si bien en agosto no hay reunión de la FED, en Estados Unidos será clave entender las pistas que entreguen sus miembros para la decisión de septiembre.
Si se muestra una postura de seguir aumentando con fuerza las tasas de interés, el mercado dará por descontada una subida el mes entrante y ahí es probable que se vea un fortalecimiento del dólar.
En el plano nacional
Entonces, en caso de que se dicte esa línea, el dólar en Colombia podría volver a apreciarse ante la preferencia de los inversionistas por llevar sus recursos a mercados más estables.
En ese sentido, si bien tampoco hay decisión de tasas de interés en Colombia para agosto, la tendencia, dijo Villar, es empezar a ver alzas un poco menos agresivas en las próximas decisiones.
Para este caso, habrá que esperar cómo recibe el mercado la posibilidad de que el país empiece a ver una tendencia de política monetaria contractiva.
La inflación en Colombia será clave entonces: en ese sentido las expectativas tampoco son las mejores. Desde el Banco de la República ahora están previendo que el descenso de la inflación podría verse con mejor claridad hacia 2023.
Al tiempo que el director del DANE, Juan Daniel Oviedo, asegura que en julio es muy probable que Colombia hubiera informado una inflación a dos dígitos, un escenario que no se veía desde mayo del 2000.
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Finalmente, habrá que sopesar el riesgo político. El 7 de agosto iniciará el gobierno Petro y se esperan noticias más claras respecto a lo que tendrá la próxima reforma tributaria y cuál será el camino que tome la transición energética en el país.
De momento, las más recientes encuestas permiten ver que la tasa de cambio en Colombia terminaría año entre los $4.200 y 4.204.
¿Cómo se comportó el dólar en Colombia durante julio de 2022?