Luego del episodio de tensión entre la saliente ministra de Ambiente, Susana Muhamad, y el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, a raíz de la propuesta de resolución presentada por el Ministerio de Ambiente, el mandatario capitalino advirtió que dicho documento podría comprometer la ejecución de diversas obras de infraestructura en Bogotá y la región, generando incertidumbre en el desarrollo urbano y ambiental.
Ante este panorama, la entidad abrió una consulta pública sobre los lineamientos para el ordenamiento ambiental de la Sabana de Bogotá, con el objetivo de establecer directrices para la planificación territorial en esta zona estratégica. No obstante, Galán manifestó su preocupación debido a que la propuesta no fue previamente concertada con la administración distrital, lo que, a su juicio, podría afectar proyectos en marcha y generar obstáculos para futuras iniciativas.
En respuesta a estas inquietudes, el Ministerio de Ambiente organizó un conversatorio el jueves 6 de marzo a través de la plataforma X, con el fin de brindar mayor claridad sobre el contenido y los alcances de la resolución. Durante la sesión, representantes de la cartera ambiental señalaron que el documento ha estado abierto a comentarios y que hasta el momento ha recibido cerca de 1.900 observaciones. Además, enfatizaron que se han llevado a cabo mesas de trabajo con diferentes actores y que el proceso de consulta continúa.
Desde el Gobierno subrayaron la importancia de generar espacios de diálogo con las autoridades locales para garantizar que el proceso de ordenamiento ambiental sea transparente y participativo. En ese sentido, aseguraron que la consulta pública busca dotar a los territorios de herramientas jurídicas para una mejor planificación ambiental, sin que ello implique una imposición unilateral del Gobierno Nacional.
¿Se afectan los proyectos de vivienda en Bogotá?
Manuel Rodríguez Becerra, profesor emérito de la Universidad de los Andes y experto en temas ambientales, destacó que la resolución se encuentra en una fase avanzada y que los gobiernos locales tienen la posibilidad de solicitar audiencias públicas con el Ministerio de Ambiente para expresar sus preocupaciones y recibir información detallada sobre el proceso. Asimismo, aclaró que este mecanismo no constituye un proceso de concertación en términos jurídicos, sino una instancia de diálogo y discusión técnica.
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Por su parte, Gustavo Carreón, otro de los voceros de la entidad, alertó sobre la desinformación en torno a la delimitación de humedales y la posibilidad de desarrollar infraestructura de vivienda en estas áreas. En su intervención, citó el artículo 7 de la resolución, el cual establece que las disposiciones contenidas en el documento no modifican la delimitación de los humedales existentes. Según Carreón, es fundamental contar con información precisa sobre el territorio para evitar interpretaciones erróneas que puedan generar alarma entre la ciudadanía.
En cuanto al desarrollo de vivienda campestre, el Ministerio de Ambiente aclaró que este tipo de proyectos no se vería afectado por la resolución en caso de que se llegue a aprobar, ya que las disposiciones planteadas buscan regular el uso del suelo sin frenar el desarrollo sostenible de la región. En ese sentido, reiteró que la resolución no pretende obstaculizar la construcción de infraestructura, sino establecer lineamientos que garanticen un equilibrio entre el crecimiento urbano y la protección de los ecosistemas estratégicos de la Sabana de Bogotá.
