Actualmente, el uso e implementación de las criptomonedas ha aumentado a nivel mundial.
Estados unidos sigue siendo un líder mundial en la regulación y adopción de la industria de las criptomonedas, pero la Ley de Confianza de Stablecoin puede establecer algunas barreras para los que recién estén incursionando en este mundo. Vea más noticias de Criptomonedas aquí
Según el portal web cointelegraph.com, EE. UU. sigue siendo un líder mundial en la adopción de la industria de las criptomonedas gracias al trabajo del senador Patrick Toomey, con la Casa Blanca al frente de la regulación de las criptomonedas.
En el 2021, el presidente Joe Biden, firmó un proyecto de ley de infraestructura bipartidista por US$1,2 billones, que incluía una nueva legislación, afectando al sector de las criptomonedas.
Recientemente, el mandatario estadounidense anunció un enfoque de todo el gobierno para regular las criptomonedas en una orden ejecutiva general que ordena a varias agencias gubernamentales que respondan preguntas específicas sobre estas monedas.
En el 2022, el país norteamericano ha estado tratando de ayudar a que la industria de las criptomonedas sea más sostenible, lo que facilitara significativamente el funcionamiento de las diferentes plataformas.
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La Ley de Transparencia de Reservas y Transacciones Seguras Uniformes de 2022, denominada Ley de Confianza de Stablecoin para abreviar, hace que Estados Unidos, sea probablemente el único país que regula y acepta completamente las monedas estables como parte oficial del sistema financiero y bancario.
Esta ley obliga a los emisores de monedas estables a adherirse a ciertas reglas, ya que allí se aclara que las monedas estables de pago no son valores; también se refiere a las monedas estables como monedas estables de pago, activos digitales que pueden ser convertibles directamente en moneda fiduciaria por parte del emisor y que tienen un valor estable en relación con una moneda o monedas fiduciarias.
Los emisores de monedas estables tendrían que elegir entre obtener la licencia de la Oficina del Contralor de la Moneda (OCC), un transmisor de dinero estatal, una licencia similar o una carta bancaria tradicional.
Los emisores que operen en los Estados Unidos, estarían sujetos a un régimen de divulgación que les obligaría a garantizar auditorías periódicas, detallar políticas de canje claras y especificar qué respalda realmente las monedas estables que emiten.
¿Alguna necesidad de una CBDC de EE. UU.?
Con el borrador de discusión del proyecto de ley circulando y obteniendo comentarios en el Congreso, se plantea la pregunta: si el acto se convierte en ley, ¿el gobierno de los Estados Unidos aún necesitaría desarrollar una moneda digital del banco central (CBDC), o lo que algunos llaman el dólar digital?
No parece ser necesario que este país desarrolle un dólar digital si los emisores privados de monedas estables son aceptados como parte del sistema financiero más amplio.
Está claro que parte de la orden ejecutiva de Biden incluye colocar «la urgencia en la investigación y el desarrollo de una posible CBDC de los Estados Unidos, en caso de que la emisión se considere de interés nacional», según una hoja informativa adjunta publicada por la Casa Blanca.
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Sería la primera vez en la historia en que una nación permite que tanto los emisores privados de monedas estables como las monedas estables emitidas por el gobierno operen en un mercado único.
Algunos países han prohibido las monedas estables privadas porque quieren promover su propio CBDC, pero Estados Unidos está tomando una ruta diferente que podría impulsar una innovación significativa en la industria de las monedas estables y, por supuesto, hacerla más transparente y sostenible.
(Con información de cointelegraph.com)