El departamento de Antioquia trazó una ruta de recuperación del empleo, con la que se busca generar durante el 2021, 120.000 puestos de trabajo desde el sector público, y contar con 80.000 nuevas vacantes del sector privado. El propósito es reactivar el empleo luego de que en el marco de la Covid-19 se perdiera el 11,1 % de los puestos de trabajo en el departamento.
Para conseguirlo, la Gobernación trazó la estrategia Arriba Antioquia, en la que se enmarcó el proyecto Misión Empleo, con proyectos para reactivar el tejido laboral a corto, mediano y largo plazo.
Las inversiones en infraestructura por $6,2 billones, la construcción y mejoramiento de 75.000 viviendas y la focalización en la agricultura, además de la transformación digital y la reforestación son cinco pasos con los que buscan generar 150.000 empleos a 2023.
Maritza López, Secretaria Regional y Sectorial de Desarrollo Económico de Antioquia, considera que uno de los pasos para reactivar el empleo es acelerar la vacunación contra el Covid-19, con el objetivo de aplicar 100.000 vacunas al día en el departamento, de acuerdo a la disponibilidad de inmunizaciones que habilite el Gobierno Nacional.
Además de la inversión en infraestructura pública y vivienda, iniciativas que pueden generar 80.000 empleos nuevos durante los cuatro años que dura el mandato actual. La premisa es que la reactivación de las obras desde el sector público moviliza a las empresas privadas.
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Daniela Trejo Rojas, Secretaria de Desarrollo Económico, Innovación y Nuevas Economías de Antioquia, considera que “el sector empresarial es un motor fundamental de la economía Antioqueña, en primer lugar, por su pujanza y sentido de servicio y pertenencia, y el segundo lugar por su capacidad de evolucionar y adaptarse a las crisis y retos, en este caso la Pandemia del Covid 19”. Esfuerzos conjuntos como la Mesa de Sector Nocturno del Valle de Aburrá, donde asisten representantes de gremios, comerciantes y municipios, la cual jalonó la apertura gradual y segura del comercio, con la extensión de horarios, es una muestra del trabajo público-privado para la reactivación de la economía, sector que al 2020 perdió más de 80 mil empleos.
Un ejemplo es la Alianza por el Empleo en Antioquia, trazada entre un grupo de empresas del departamento y la caja de compensación Comfama, con la que buscan que buscan conectar a mujeres y jóvenes con oportunidades laborales. Precisamente, esos dos grupos poblacionales han sido los más afectados por el desempleo ocasionado por la pandemia. Con la alianza buscan gestionar 2.000 puestos de trabajo y contar con la participación de 6.000 personas en procesos de mentoría.
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Otro programa se llama Creo (Crecemos con Empleo y Oportunidades), el primer bono de impacto por emergencia de Colombia, que cuenta con procesos de formación y conexión a oportunidades laborales en el Valle de Aburrá.
Paola Andrea Mejía, responsable de empleo y emprendimiento de Comfama, considera que “un reto importante es generar oportunidades para la población que no tiene experiencia laboral” y se muestra convencida de que el sector empresarial de Antioquia está comprometido a generar empleo y escuchar a la población joven.
Las cajas de compensación son un actor determinante en la reactivación porque cuentan con agencias de empleo, capacitación, mesas de trabajo con el sector privado y acompañamiento para quienes deseen emprender nuevos negocios.
Comfenalco, por su parte, se alió con el sector de confecciones, articulando compañías y academia, para capacitar a las personas en confección de moda y conectarlas con las empresas que buscan mano de obra para maquilar.
También están próximos a lanzar el programa Reactívate, movilización por el empleo juvenil para capacitar a esta población, conectarla con posibilidades de trabajo y darle facilidades para emprender. El objetivo es movilizar a 12.000 personas y lograr que 6.000 consigan una oportunidad de empleo en articulación con las empresas.
Liliana Galeano, gerente de empleo de Comfenalco, considera que “tenemos el reto de aliarnos entre sector público, privado, cajas de compensación y centros de formación porque la reactivación implica mucha agilidad. No es suficiente generar empleo, sino crear oportunidades para que las personas que tienen más dificultades de emplearse encuentren un camino laboral”.
Desde la academia, el PhD en Economía y profesor de la Universidad Eafit, Alejandro Torres, considera que los indicadores muestran una buena recuperación del empleo informal, pero apunta que sigue existiendo un reto asociado a los sectores formales.
“Es importante el trabajo articulado que se ha dado con los grandes empresarios para que se generen nuevos puestos de trabajo y las apuestas que se están haciendo en las subregiones, especialmente en la reactivación de obras de infraestructura”, comenta Torres.
Para el experto, el segundo semestre será determinante para que Antioquia se encamine en la consecución de las metas de generación de empleo en medio de la reactivación económica.
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