A pesar de que la subida de tasas de interés y la mayor volatilidad financiera internacional afectan a los países emergentes, se ha visto que los mercados cada vez más se diferencian entre sí.
Así lo afirmó el jefe para América Latina y el Caribe del Centro de Desarrollo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Sebastián Nieto, en una entrevista con Valora Analitik sobre economías emergentes y perspectivas cambiarias y monetarias de la región en 2019.
“Los mercados castigan, en particular, a los que ven con una mayor insostenibilidad fiscal; pueden ser países donde el spread soberano ha venido creciendo sustancialmente. Pero, no afecta a todos los mercados emergentes”, puntualizó Nieto.
En el caso específico de América Latina, esa diferenciación ha sido bastante marcada.
En Venezuela, donde el riesgo para los inversionistas es evidente, la salida de capitales ya tuvo lugar.
En Argentina, hubo una salida importante, pero al inicio del Gobierno de Macri entraron capitales de corto plazo.
“Un reto de los mercados emergentes es el de no solo atraer capital de corto plazo, sino inversión de más largo plazo; Inversión Extranjera Directa (IED), que es más estable en el tiempo y que no se ve afectada por los ciclos de los mercados financieros”, explicó en analista.
Monedas
La volatilidad cambiaria es bastante alta, y difícil de predecir, sobre todo, con un escenario de subida de tasas de interés en varios países desarrollados.
De acuerdo con Nieto, se percibe que algunos países convergen hacia una estabilidad; no se prevén movimientos más fuertes después de las depreciaciones en 2018.
Política monetaria
La buena noticia para gran parte de los países que tienen una política de inflación objetivo es que la tasa de inflación se ha ido acomodando dentro del rango superior de la meta.
“Esto da un respiro hacia una política monetaria que permita mayor inversión interna en estos países”, comentó Nieto.
El caso de Argentina es diferente al resto, pues no tiene una política de inflación objetivo.
Esa Nación ha intentado acomodar la inflación desde el inicio del Gobierno de Mauricio Macri, “lo cual ha sido bastante difícil, ya que el policy mix de política fiscal y monetaria no ha contribuido a con los objetivos iniciales de la política de inflación objetivo”, comentó el experto.
Ahora el reto es cómo mantener una estabilidad monetaria, al tiempo que se necesita generar mayor crecimiento económico.
“En el caso de Argentina, es un escenario muy difícil por el componente de la salida capitales. También es un país que se ha venido abriendo al comercio internacional, a diferencia de años anteriores, pero sus principales socios se han ido cerrando al comercio”, indicó.