La Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) ha presentado una demanda contra Elon Musk, acusándolo de no revelar oportunamente su participación accionaria en Twitter antes de adquirir la empresa en octubre de 2022.
En ese contexto, vale la pena recordar que Musk, que también es el director ejecutivo de Tesla y SpaceX, compró Twitter por US$44.000 millones a finales de 2022 y cambió el nombre a X al año siguiente.
Antes de la adquisición, había acumulado una participación en la empresa superior al 5 %, lo que habría requerido revelar sus participaciones al público en un plazo de 10 días naturales tras alcanzar ese umbral.
No obstante, según la SEC, Musk superó el umbral del 5 % de propiedad en marzo de 2022, pero retrasó la divulgación de esta información, lo que le permitió adquirir más acciones a precios más bajos, ahorrando al menos US$150 millones.
¿Por qué la SEC demanda a Elon Musk?
Con lo anterior, la normativa de la SEC exige que los inversores que adquieren más del 5 % de una empresa cotizada en bolsa deben informar su participación dentro de los 10 días posteriores a la compra.
Sin embargo, Musk no cumplió con esta obligación, revelando su participación el 4 de abril de 2022, 11 días después del plazo establecido. Durante este período, continuó adquiriendo acciones de Twitter, acumulando más del 9 % de la compañía antes de hacer pública su participación.
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La SEC argumenta que este retraso en la divulgación permitió a Musk comprar acciones adicionales a precios que no reflejaban su interés en la empresa, lo que resultó en un ahorro indebido de al menos US$150 millones. La demanda busca imponer una multa civil y la devolución de las ganancias obtenidas por este retraso.
El abogado de Musk, Alex Spiro, dijo en un comunicado enviado por correo electrónico el martes que la acción de la SEC es una admisión de que “no pueden presentar un caso real”. Además, agregó que Musk “no ha hecho nada malo” y calificó la demanda como una “farsa” y el resultado de una “campaña de acoso de varios años”, que culminó en una “demanda de un solo cargo”.
Esta no es la primera vez que Musk se enfrenta a acciones legales por parte de la SEC. En 2018, llegó a un acuerdo con la comisión tras ser acusado de fraude por sus tuits sobre la privatización de Tesla. Desde entonces, ha mantenido una relación tensa con el regulador, acusándolo en ocasiones de acoso.
La demanda actual se produce en un contexto político complejo, ya que fue presentada poco antes de la salida del presidente de la SEC, Gary Gensler, y la llegada de Paul Atkins, designado por la administración Trump, lo que podría influir en el curso futuro del caso.