Las protestas en Bogotá se han seguido intensificando en la tarde de este 8 de febrero, tras conocerse que ante la falta de unanimidad de la Corte Suprema de Justicia en la elección de la nueva fiscal, Martha Mancera quedaría en encargo de la entidad.
Si bien varios grupos protestaron de manera pacífica en la capital, algunos manifestantes bloquearon hacia las 2:00 p.m. los accesos del Palacio de Justicia, impidiendo la salida e ingreso de los funcionarios que trabajan en la allí.
“La Corte Suprema de Justicia rechaza enfáticamente el asedio de las últimas horas al Palacio de Justicia de la Capital de la República. Situación que, además de afectar gravemente el derecho a la libertad de locomoción, pone en grave riesgo la vida e integridad física de magistrados, empleados, periodistas y demás ocupantes de la principal sede judicial del país”, escribió la entidad en un comunicado.
El ente enfatizó en que “la democracia queda en vilo cuando cualquier sector o actor de un país pretende presionar política, física o moralmente decisiones de la justicia”.
La Corte Constitucional, otro de los órganos del poder judicial en Colombia salió a dar su respaldo a su entidad hermana. “Reclamamos con vehemencia respeto por la independencia de la Corte Suprema de Justicia, así como por la integridad de sus miembros, y deploramos los ataques, la violencia y los insultos, lo que solo sirve para retardar las decisiones que los ciudadanos, todos, estamos esperando”, dijo.
Los apoyos a la Corte Suprema de Justicia
Las marchas de este jueves fueron convocadas por la Federación Colombiana de Trabajadores de la Educación (Fecode) y en el transcurso del día se han ido sumando otros grupos como organizaciones indígenas. En ellas, los manifestantes han expresado su apoyo al presidente de Colombia, Gustavo Petro, en el tema de la elección del nuevo fiscal.
Precisamente, el mandatario, ha venido alentando las movilizaciones con mensajes como el de “Comienzan las marchas por la decencia en Colombia”, que escribió en su cuenta de X, en horas de la mañana.
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Tras conocerse la decisión de la Sala Plena del Tribunal y las voces de rechazo contra la severidad de las protestas, el mandatario escribió: “Aquí la única que ataca la justicia es la extrema derecha que teme una fiscal decente. Por tanto, le ordeno a la Policía Nacional actuar sobre las personas que impiden la libre movilidad de magistrados y presentar un informe público de quienes se tratan”.
Muchas reacciones se han hecho evidentes en la jornada de hoy en relación a la elección del nuevo líder de la Fiscalía. El expresidente de Colombia, Álvaro Uribe, dijo que ha guardado total silencio frente a la situación, tanto por respeto a las instituciones como por “mi situación personal y el antecedente de diferencias con algunos magistrados”.
Sin embargo, expresó “que no se puede permitir que grupos violentos tengan a los magistrados en una especie de secuestro. Se requiere la fuerza del Estado para que de manera táctica y sin crear riesgos se garantice seguridad y libertad a los magistrados”.
El exministro de Educación del Gobierno Petro, Alejandro Gaviria, también se hizo presente al afirmar que “la intimidación y la violencia en contra de los magistrados es inaceptable. El discurso del presidente es contradictorio. Dice defender las instituciones, pero está propiciando un clima de opinión adverso y violento en su contra”.
Más álgidas fueron las declaraciones del alcalde de Medellín, Federico Gutiérrez: “Ya incendiaron una vez el Palacio de Justicia con los magistrados vivos adentro, cuando el M-19 operaba como grupo terrorista. Murieron calcinados. ¿Quieren volver a hacer lo mismo ahora que ostentan el poder? Está sí que es una verdadera ruptura institucional. Todo nuestro respaldo a la Corte Suprema de Justicia”.
En línea con lo anterior, la representante a la Cámara por el Partido Verde, Catherine Juvinao, advirtió al presidente que cualquier nuevo incidente contra el Palacio de Justicia por parte de una izquierda “enardecida revivirá los peores fantasmas en un país que no quiere repetir su historia. Promover el caos puede terminar en el suicidio de su proyecto político. Cuidado”.
Finalmente hay que decir que en uno se sus últimos trinos, el presidente Petro se mostró en una postura retadora.
“Lo que han intentado explícitamente sectores ajenos a la Corte Suprema de Justicia y ligados con el narcotráfico y la corrupción es no permitir el mandato que el pueblo otorgó por voto popular. Así que la ciudadanía tiene todo el derecho a organizarse democrática y pacíficamente”, escribió.
Y agregó que “atacaron el sindicato de trabajadores más grande de Colombia mientras permitían impunidad de ingresos de la mafia en campañas anteriores. Les solicito a los maestros y maestras de Colombia, a la fuerza del saber, coordinas las juntas de organizaciones populares en cada municipio para defender la democracia y el voto popular”.
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