El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, firmó el decreto ejecutivo 461 en el que se dispuso la terminación del estado de excepción por grave conmoción interna en seis provincias del país. Vea más noticias internacionales aquí
Este decreto deja sin efecto la medida ordenada el pasado 13 de junio en las provincias de Imbabura, Pichincha y Cotopaxi, y que luego se extendió el 20 a las otras tres provincias, Chimborazo, Tungurahua y Pastaza.
Esta decisión desactivaría la maniobra del expresidente Rafael Correa para destituirlo.
Durante la sesión en el Congreso donde se resuelve la solicitud de los legisladores correístas para desplazarlo y convocar a elecciones anticipadas, el secretario Jurídico de la Presidencia, Fabián Pozo, que compareció en la reunión en representación del presidente de Ecuador, señaló que sin decreto de estado de excepción los asambleístas solicitantes no tienen ningún argumento para decir que hay “grave conmoción interna”, una de las causales que permite activar el proceso.
La medida llega en un día clave para el mandatario: se concretó un primer acercamiento con el líder indígena que tienen en jaque al país hace casi 15 días.
Representante del Gobierno se reúnen con el presidente de la Conaie, Leonidas Iza, y otros líderes indígenas, en un primer acercamiento convocado por el titular del Legislativo, Virgilio Saquicela, quien ha destacado la voluntad de diálogo de las partes. “Creo que este camino va a prosperar y creo que las partes están predispuestas a ese diálogo cediendo de parte y parte, sin condicionamientos sino llegando a acuerdos puntuales”, dijo al expresar su esperanza frente a esta mesa de diálogo.
Señaló que “de parte del gobierno hay la apertura” para el diálogo, para el cual se han ofrecido mediar la iglesia, la ONU y universidades.
Entre los reclamos de la Conaie figuran una reducción de precios de combustibles y moratoria por un año para el pago de deudas de campesinos con la banca. Pide que el gobierno cumpla todas sus demandas para conversar.
Las violentas manifestaciones, que comenzaron el 13 de junio, se han caracterizado por el corte de carreteras y el bloqueo de vías, y han registrado episodios violentos que han dejado, hasta el momento 5 fallecidos y no menos de 200 heridos entre los manifestantes y las fuerzas del orden.
Pese a la decisión de Lasso, la Asamblea Nacional de Ecuador instaló la sesión para tratar, como único punto, un pedido de destitución del presidente, quien denunció un intento de golpe de Estado en su contra.
La sesión se instaló de forma virtual, con la asistencia de 135 asambleístas, el secretario jurídico de la Presidencia, Fabián Pozo, y presidida por el titular del Legislativo, Virgilio Saquicela.
La petición de la destitución del gobernante la realizaron asambleístas afines al ex presidente Rafael Correa (2007-2017) bajo la causal de grave conmoción interna debido a la ola de protestas contra el alto costo de la vida y las políticas económicas del Ejecutivo.
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Manifestaciones dejan escasez de alimentos en Ecuador
Los bloqueos de carreteras, en más de 24 provincias del país, hacen que a las principales terminales de Transferencias de Víveres no lleguen los alimentos.
Por ejemplo, en la terminal de víveres de Guayaquil, a diario, ese centro de abastos recibía 3 mil camiones con alimentos que bajaban de las montañas, pero ahora el 70 % no llega por los cierres viales.
La escasez encareció los alimentos y afectó a los consumidores, que además tienen dificultades para conseguir huevos, pollo o gas de uso doméstico, que es distribuido en tanques de 15 kg.
«Todo está carísimo. Antes me vendían una libra de tomate en 50 centavos y ahora me cuesta 1 dólar», señaló Silvana Quimí, ama de casa de Guayaquil, donde los precios se han «disparado».
(Con información de Infobae, AFP y EFE)
